Si alguien piensa en Sevilla sólo hay un color que le puede venir a la cabeza: dorado. En una versión algo más relajada, el amarillo también es un tono que casa a la perfección con la ciudad hispalense -además del rojo y el verde para los amantes del fútbol-. Dejando por unos días la casa que ha alquilado en El Puerto de Santa María, Rocío Osorno (35 años) se ha desplazado hasta su tierra para hacer fotos con un vestido tremendamente especial.
Así lo ha definido ella misma en los stories de su poderosa cuenta de Instagram, donde ya supera el millón y medio de seguidores. "El único color que puede desbancar al rosa en esta temporada... Es de Mango, el bolsito a juego también es de Mango. Los pendientes de Zara y los zapatos de Asos".
Efectivamente, Rocío Osorno ha sacado la artillería pesada con una prenda de Mango de la que EL ESTILO de EL ESPAÑOL conoce todos los detalles. Se trata de un vestido que combina dos de las tendencias del momento: las transparencias y las plumas.
[La falda midi amarilla de Rocío Osorno con la que sin duda triunfarás en tu próximo evento]
Según se detalla en la web de la firma catalana, la pieza "cuenta con una pieza interior de estilo lencero que junto con la capa de gasa con detalle de cuello halter, se convierte en una opción elegante y original para tus eventos más especiales. Es de diseño recto y corto. Cuello alto. Manga abullonada. Cierre de lazo en los puños. Terminación de flecos. Abertura en la espalda con cierre de botón". Su precio es de 250 euros.
La empresaria e influencer sevillana lo ha combinado con un minibolso a juego, también de la misma marca, amarillo y con plumas. Su precio, 49,99 euros. Todo pertenece a la Capsule Collection de Mango.
Y además le ha añadido unos pendientes increíbles firmados por Zara y unas altísimas sandalias de tacón en color púrpura brillante. Para esta ocasión, Rocío ha optado por recogerse el pelo en una cola baja. Un auténtico acierto, ya que así da protagonismo a la prenda para que se vea a la perfección la espectacularidad de la misma. ¿Te animas con el amarillo o eres supersticiosa?