Todo comenzó hace apenas cuatro años. La firma neoyorquina Bumble & Bumble, fundada en 1977, revolucionaba el mundo de la cosmética con un spray que prometía crear en toda melena (por rebelde que ésta fuese) esas ondas playeras e inocentes que nos quedan tras una tarde al borde del mar. Y no hacía falta irse a la costa. Su Surf Spray, compuesto de sal, minerales y extractos marinos se convertía en todo un éxito de ventas y abría una nueva línea de productos que explotar.
Adorado por todas las celebrities, en todas las alfombras rojas y sin importar la época del año en el que les tocase pasear por ellas; las ondas surferas se convertían en la tendencia capilar del momento. Y, como ninguna otra, se ha sabido mantener hasta ahora.
Con opciones para todos los largos (y todos los colores, ya sabemos que ahora el gris domina no solo las pasarelas de moda), ya hay muchos productos que, además de conseguirlo, te dan un extra de cuidado e hidratación. Pero además de ellos, te contamos cómo conseguirlas desde casa. Aunque esa casa esté en pleno centro de Madrid o perdida en mitad del campo.
DORMIR CON UNA TRENZA POR LA NOCHE
Es ese remedio de la abuela que siempre consigue su objetivo. Si lo haces con el pelo húmedo, conseguirás que las ondas que se crean se mantengan, al menos, durante el día siguiente. Y aunque el resultado es mucho más curvo que el de las ondas playeras propiamente dichas, tan solo han deshacerse después con los propios dedos.
USAR UN PRODUCTO ESPECÍFICO
Con ingredientes que imitan las propiedades del agua del mar, dan movimiento y texturizan. Se puede aplicar en el cabello húmedo o seco, dependiendo del efecto que se quiera conseguir, y recogerlo en pequeños moños o sujetar mechones con horquillas para conseguir un efecto más duradero.
Para un acabado effortless, el más natural, es mejor aplicarlo antes de que el pelo se seque por completo. Para un peinado más trabajado, no hay que olvidar que estamos ante un producto de styling, con lo que puede utilizarse después del secador, a modo de laca. Conseguir la textura es fácil, moldeando con las manos y cogiendo el cabello desde las puntas, apretando suavemente para que penetre bien el producto.
TRABAJAR CON LA PLANCHA
Y no necesitas nada específico. Se trata de alisar el cabello húmedo, previa aplicación de un producto que lo proteja y dividiéndolo en secciones para ir ondulándolo, poco a poco, con ella. No se trata de girarla sobre sí misma, -un error que cometemos la mayoría-, sino de ir moviéndola en distintas direcciones para ir consiguiendo ondas suaves y naturales.
CON PINZAS, HORQUILLAS Y DEJANDO SECAR AL AIRE
Una opción para las que, aún teniendo tiempo, no son unas expertas en esto de ponerse manos a la obra con su cabello, -o, simplemente, no les apetece-. Se trata de ir recogiendo el pelo por secciones, empezando por la parte superior, enroscándolo sobre sí mismo y sujetándolo con pinzas y horquillas. Para que no se quede con un aspecto demasiado encrespado, lo mejor es aplicar un poco de gel e ir secando con la toalla hasta eliminar el exceso de humedad.
EMBOTELLA EL AGUA DE MAR
Sí, de una forma muy casera. Para conseguirla debes ir, lógicamente, a la playa; pero sus propiedades duran todo lo que te dure el spray, con lo que puedes embotellarla y llevártela de vuelta a la ciudad o pedir que lo hagan por ti. Aunque no consigan el mismo nivel de hidratación que los productos específicos, (aquí te contábamos algunos de los más básicos del verano) o encrespen demasiado el cabello, puede ser una buena solución de emergencia.