Dubái, Beijing y Londres. Tres ciudades que están llamadas a convertirse en pura moda. Y desde dentro. Los conjuntos residenciales son obra de arquitectos modernistas que crean, cada vez, edificios más impresionantes; mientras el interior se deja en manos de los que saben: los directores creativos de las firmas fashion más lujosas. Y, de momento, Miami mantiene su reinado como la ciudad donde conseguir una casa que sea, literalmente, tendencia.

Con permiso de los decoradores, son los diseñadores de moda quienes están llamados a convertir un simple apartamento en “el apartamento”. Firmas como Calvin Klein, Tommy Hilfiger o Gianni Versace llegaron a la ciudad norteamericana hace ya varios años; mientras que otras como Fendi, Armani o Missoni no han dudado en sumarse a este boom inmobiliario. Casas de moda que han firmado con su nombre torres residenciales de súper lujo y en las que fashionistas de todo el mundo se dejan millones de dólares.

GIORGIO ARMANI, LA NUEVA INCORPORACIÓN

El último en llegar a la ciudad ha sido Armani. En las tranquilas playas de Sunny Isles Beach, el diseñador italiano ha colaborado en el diseño de más de 300 apartamentos con precios que van desde los 2 a los 15 millones de dólares cada uno. Un proyecto que no se completará hasta 2019, pero que ya ha vendido el 72% de sus inmuebles.

Gil Dezer, desarrollador del proyecto en Dezer Development y que ya ha trabajado con Donald Trump en varios de sus edificios, aseguraba a WWD hace apenas unos meses que, tras arduas negociaciones con la casa italiana, consiguió la licencia para ello. “Estaba en Dubái cuando me alojé en el Armani Hotel y pensé: esto es increíble, tengo que traerlo a Estados Unidos”. Un trabajo en el que Giorgio Armani ha querido estar presente en todo momento, teniendo el control completo del diseño del interior del edificio que ha seguido de forma personal.

FENDI, SU PRIMERA INCURSIÓN INMOBILIARIA

Para la casa italiana, el edificio de doce pisos localizado al sur de Bal Harbour ha sido su primer paso en el mundo del real estate. Un total de 58 residencias bajo el nombre de Château Residences, con vistas al océano y unos precios que oscilan entre los 5 y los 22 millones de dólares. Un proyecto que finalizaba el año pasado y cuyos apartamentos han sido adquiridos –solo quedan cuatro- por auténticos amantes de la firma. Algunos, incluso, fueron regalados por maridos multimillonarios a sus esposas. Los más exclusivos cuentan con spa, chef privado, cine y habitaciones dedicadas para los niños.

MISSONI BAIA, UN COMPLEJO PARA 2020 

La colaboración entre la marca italiana y OKO Group, propiedad del billonario ruso Vladislav Doronin, llegará a Biscayne Bay durante el verano de 2020. Con residencias que oscilarán entre los 500.000 y los 3,5 millones de dólares, estará decorado (en sus zonas comunes) con los coloridos estampados de la firma; mientras que quienes quieran llevar su originalidad al interior de su apartamento deberán abonar el coste adicional.

Y es que los diseñadores ya no se conforman con las típicas colecciones para el hogar, como es el caso de las últimas colecciones creadas por Gucci para alegrar tu hogar (y que prometen convertirse en la sensación de la temporada) o las divertidas opciones que ofrece Jeremy Scott. Ni siquiera, con erigir sus propios hoteles y restaurantes; ahora también aceptan el reto de firmar el interior de los edificios residenciales más lujosos del momento. Como ya hizo Karl Lagerfeld, con el lobby de las lujosas torres de Sunshine City, con 245 apartamentos, que abrió el camino a estos nuevos vecinos de Miami.