Casi todos los colegios de España abren sus puertas a partir de hoy, para recibir con alegría y cariño a alumnos nuevos o ya veteranos con ganas de aprender más y más.

Como cada año, toca reservar los libros escolares, si no tienes un herman@ mayor del que heredarlos, y comprar nuevos materiales como cuadernos, lápices de colores, bolis, estuches, rotuladores, gomas, mochilas, etc. Si no te han dado una lista en el colegio, con el material imprescindible, repasa con tus hijos lo que tenéis aprovechable del curso pasado y haz tú una relación de los que os falta.

Pero no nos olvidemos de una parte importantísima, de la ropa. Tanto quienes llevan uniforme como quienes no lo hacen deben tener listas en el armario las prendas con las que vivir el nuevo curso.

Después de haber desgastado pantalones, zapatos y camisetas el año anterior, por caídas o uso repetido de las prendas, y sobre todo tras el verano, en el que los niños suelen pegar un estirón, debemos hacer una pequeña inversión en los nuevos looks que los más pequeños llevarán este año, no sólo para ser los más guapos de la clase sino para disfrutar al máximo de todas las actividades con la ropa adecuada. 

Es bien sabido que muchos colegios tienen impuesto el uso de los uniformes. Su origen está en los centros educativos católicos que decidieron establecer una única forma de vestir para fomentar la igualdad de los niños y no hacer distinciones entre ellos por la variedad y calidad de su indumentaria. Con el uniforme se pretendía además hacer la vida más cómoda al padre o madre que tenía que vestirlos cada mañana.

Las características generales de los uniformes están basados en falda por debajo o a la altura de la rodilla y prendas de punto como chaquetas abotonadas para las niñas y pantalones grises largos y jerseys de pico para los niños, y para ambos sexos se marca el uso de la camisa o polo. Existe una segunda opción para el sexo femenino, los pichis, que son vestidos sin mangas llevados por encima de la prenda superior (camisa o polo). Sea cuál se a la opción, siempre deben llevar zapatos (de los que se prescribía el color y tipo de horma) y abrigos (que eran totalmente libres de elección). 

En la web de El Corte Inglés existe una sección donde podrás encontrar los uniformes correspondientes al colegio de tus hijos con tan sólo seleccionar en los desplegables que aparecen en la parte superior: la provincia, localidad y nombre del centro.

En los colegios públicos, sin embargo, no existe la obligatoriedad del uniforme por lo que los padres deben tener ropa suficiente para cubrir al menos cinco días de la semana. En este caso, estos son los básicos que deberás encontrar en todo armario que se precie: 

- Ropa de abrigo. Es esencial que los niños vayan bien abrigados. Dependiendo de en qué parte del mapa nos situemos la ropa deberá ser de mayor o menor grosor pero, aún así, siempre debemos tener algo en el armario que nos libre de esa nevada con la que no habíamos contado. 

- Calzado apropiado. Una de las cosas más importantes es llevar un calzado adecuado para cada actividad y dependiendo del tiempo siempre. Botas de agua para la lluvia o específicas para la nieve, un calzado más arreglado o unos botines son los básicos que deberás tener para que el niño vaya seguro, disfrute jugando en el recreo (a pesar del mal tiempo o de que el suelo esté mojado) y no se enfríe. 

- Como pez en el agua. Para los más pequeños es imprescindible dar unos buenos cursos de natación para poder defenderse en el mar o la piscina cuando llegue el verano. Normalmente, las piscinas cubiertas no están tan abarrotadas como las de verano, por eso, aprender en ese momento será más fácil para ellos. Es imprescindible que le compres un buen gorro que sea cómodo y no comprima demasiado su pequeña cabeza, ni tampoco le quede tan amplio que el agua se cuele por dentro. Los bañadores de una pieza y estilo nadador son muy útiles para las niñas y los que tienen forma de slip son los más apropiados para los chicos, según los expertos. 

- Deporte: No sólo la natación es clave en esta época, una de las clases impartidas en los colegios es dedicada enteramente al deporte, la Educación Física, con lo que tendremos que adquirir un buen chándal que permita realizar todas las actividades. También son importantes las deportivas, tiene que ser un calzado cómodo, que respire y del tamaño apropiado para que no haga daño: no vale comprar una talla mayor, para que al año siguiente siga sirviendo, es importante que sea de la medida correcta para la seguridad de quien las lleve y para el correcto desarrollo de sus pies.