El futuro, poco a poco, va llegando. Y también en la moda. El avance continuo de los procesos de reciclaje textil permite crear prendas con hasta un 90% de algodón reciclado. El impacto medioambiental se reduce enormemente y se protege, además, la biodiversidad. Un proceso que comienza con un diseño que, esta vez, pone Sybilla; y la elección de materias primas y fibras sostenibles que, una vez más, pone Ecoalf.

La diseñadora se alía con la marca fundada por Javier Goyneche para crear una colección cápsula de diez prendas muy femenina y divertida, que aúna diseño y sostenibilidad. Prendas reversibles con los colores y estampados más característicos de Sybilla que han sido confeccionados en materiales reciclados. Y es que fue ella quien le propuso a Ecoalf esta colaboración: “admiro mucho el trabajo que ha hecho Ecoalf al investigar tejidos procedentes de materiales de deshecho”.

Prendas que van desde los 200 a los 300 euros y que se fabrican en tejido de nylon reciclado proveniente de las redes de pesca que han sido ya desechadas. Ecoalf consigue con ellas prendas ultraligeras pero resistentes que, unidas al increíble diseño de Sybilla, completan un armario funcional y urbano.

Este es el camino que más me interesa en la moda en este momento.

Y es que Sybilla considera que la practicidad no está reñida con la belleza del diseño y que debemos enfrentar uno de “los grandes problemas de nuestro tiempo”. Ecoalf, por su parte, nació hace ya cinco años con esa misma intención, ofrecer una moda alternativa que apuesta por el reciclaje y respeta el medio ambiente. Y su objetivo es alto: limpiar de residuos nuestro precioso Mar Mediterráneo.

Goyeneche cree “que el futuro de la moda es ser sostenible y no seguir abusando de los recursos naturales del planeta”. Por eso, colabora con otras instituciones como The Hap Foundation o Ecoembes, convirtiendo las inmensas toneladas de plástico que recogen del fondo del mar en ropa de calidad.

Una labor de investigación a la que ya se han sumado gigantes de la moda low cost como Zara o H&M. La primera anunciaba este año que entre el 5 y el 10% de sus prendas serán confeccionadas, a partir de ahora, con materiales reciclados o algodón orgánico. Una colección que desde el 2015 se llama Join Life (Únete a la vida) y que estarán realizadas, entre otros, en un material que ya es suyo, la refibra.

Creada en Lenzing (Austria), la refibra un nuevo tipo de tejido que mezcla residuos de algodón y madera procedente de los bosques sostenibles que ellos comercializan en exclusiva. Los materiales proceden de la ropa que se recoge en las tiendas y que es clasificada por Cáritas. Además, tras esta línea de ropa se encuentra el proyecto Green to Wear+, con el que quieren asegurarse que su proceso hace un buen uso del agua, utiliza energías renovables y materias primas siempre ecológicas.

H&M, por su parte, ha conseguido crear el BIONIC®, un tipo de poliéster compuesto en su totalidad de plástico reciclado procedente de residuos de las orillas marinas. Una colección que, este año, tiene como imagen a la modelo Natalia Vodianova y que se compone de vestidos vaporosos y plisados con impresión de peonias y mimosas que son puro sueño sostenible.