Rihanna es mucho más que una cantante. “Diseñar es algo que he querido hacer desde siempre”. Así de contundente era la joven de Barbados antes de comenzar lo que sería su gran desfile para River Island, la marca británica con la que colaboró por primera vez, creando una colección cápsula de ropa. La presentaba en pasarela, en el mítico edificio Old Sorting Office de Londres, con una sonada fiesta que se prolongó hasta bien entrada la madrugada. Rihanna estaba encantada y lo celebraba a lo grande.

Una pasión que vuelve a demostrar con una rompedora colaboración, esta vez, en el mundo de la alta joyería. Fue Chopard quien invitó a la cantante a crear su: Rihanna Loves Chopard. Una unión que, por muy lejana que pudiese parecernos, no debe extrañarnos tanto. La cantante es una constante para la casa suiza en la alfombra roja, donde suele contar siempre con alguna pieza de la marca.

En realidad, son dos colecciones de joyería: una de alta joyería y la otra de joyería más ‘asequible’. Estarán a la venta esta misma primavera, una vez sea presentada en el próximo Festival de Cannes, que tendrá lugar en mayo, (Chopard patrocina el evento). La colaboración se divide en dos temáticas diferentes: High Jewelry, que nos presenta las raíces de la cantante, inspirándose en la Isla de Barbados, su carnaval y sus jardines; y otra, con un total de nueve piezas mucho más sencillas, minimalistas, que reitera la estética Ice Cube y con el oro rosa como protagonista.

Caroline Scheufele, directora artística y co-presidenta de Chopard, explicaba la colaboración con la cantante como “una forma de ir más allá de los límites convencionales”.

Pero ésta no es la primera vez que una firma de moda busca a Rihanna para una colaboración con el objetivo de llegar a un grupo más amplio (y alternativo) de personas. Fue también sorprendente su colección con Manolo Blahnik: RihannaXManolo, con una serie de zapatos que mantenía el denim como tejido vertebrador.

Suya fue también la línea de gafas de sol que la cantante creó para Dior, justo en uno de los momentos más complicados de la firma, cuando ésta dejaba marcar a Raf Simmons en octubre de 2015. La colección, que se llamaba Rihanna, tenía una clara estética futurista. Al igual que su colaboración con River Island, que llegó a presentar en la propia Semana de la Moda de Londres. Y es que, Rihanna no es solo cantante, sino que también quiere ser diseñadora. Y colaboraciones no le faltan.