Su marca es difícil de pronunciar: Hunkemöller. Pero su ropa interior se ha convertido en el objeto del deseo de las españolas en los últimos años. Ellos han sabido colarse en nuestro armario y te contamos cómo lo han conseguido.
Las españolas adoran los colores, (Vi Patel).
Hunkemöller, de origen holandés, es líder de ventas en lencería femenina en el norte de Europa y es consciente de que España es una plataforma importantísima para su consolidación; por lo que, en los próximos cinco años tiene previsto abrir, nada más y nada menos que cincuenta tiendas en nuestro país.
"Muchas marcas del norte no vienen al sur por las diferencias que hay en el mercado. Pero nosotros creemos que España está dentro de los cinco mercados top de Europa. Es cierto que hay que adaptarse a sus necesidades. Por ejemplo, en Holanda los bikinis se venden en febrero y marzo y en España no empiezan a comprarse hasta junio. Sin embargo, hay un aspecto importante que cuadra con nuestra marca: las españolas adoran los colores y Hunkemöller es una de las marcas que más usan el color", explica el director de operaciones de esta empresa, Vi Patel.
Con más de 3.500 referencias diseñadas cada año, Hunkemöller se centra en ofrecer una gama de productos de moda: desde prendas íntimas, desde zapatillas y prendas para dormir, hasta bañadores y accesorios playeros, medias y calcetería, así como productos de belleza. Sí, también entran en el mercado de belleza. Así, se convierte en una tienda con todo lo que puede querer y necesitar la mujer.
Su seña de identidad son los diseños innovadores y tejidos interesantes que les han convertido en una firma de referencia, pero también un contacto directo con los clientes, -"con los que se tiene un diálogo continuo para conocer sus gustos"-, y que les ayudan a elegir qué se coge de las pasarelas para llevar a los escaparates.
A pesar de que desde la compañía insisten en que hay unos valores comunes en las mujeres europeas a la hora de elegir su ropa interior, Hunkemöller adapta un 30% de sus líneas a cada país para nacionalizar su oferta según las necesidades de las suecas, holandesas, españolas o alemanas.
"En España, la prenda estrella de nuestra marca sigue siendo el sujetador. Hemos adoptado la última tecnología, utilizando la impresión en 3D para que se satisfagan las necesidades casi personales de cada clienta y unificar copas", aclara Vi Patel. Sin embargo, el producto que más ha sorprendido por sus ventas en España ha sido el camisón lencero (como ya veíamos con Miss Camisones en el sur del país), que se ha convertido casi en un básico en las tiendas de esta marca en nuestro país.
Patel asegura que su plan de extensión para llegar a 1.600 tiendas en unos años no sólo quiere fijarse en las grandes ciudades, sino que quiere llegar a todos los rincones del país "para estar tanto en una calle principal como en un pueblo de 15.000 habitantes".
Es una forma de competir con las grandes marcas que se une a su apuesta por fijar una buena relación calidad/precio y su servicio de atención al cliente, directo y casi personal que es una máxima en todos los trabajadores de Hunkemöller. Un objetivo ambicioso que cuenta con Doutzen Kroes como embajadora (y que se une a otras muchas modelos que prestan su imagen al mundo de la lencería), y que sigue guiándose por el estudio de las tendencias de compras de las mujeres que tiene como punto de partida su nacionalidad.