Colette cierra sus puertas. Una frase corta que, para los que vivimos en el mundo de la moda, tiene mucho significado. Cuatro palabras que marcan el fin de una era. Centro de peregrinaje para los trendsetters del mundo, la boutique parisina se había convertido en un punto de interés más que visitar cuando llegabas a la Ciudad de la Luz. Nadie se iba sin pasar, aunque fuese solo un momento, por la 213 Rue Saint-Honoré. Tan solo unos minutos hacían falta para salir de allí sabiendo qué se llevaba (y se iba a llevar) esa temporada.
Como con todas las cosas buenas, siempre ha de haber un final. Después de veinte maravillosos años, Colette cerrará sus puertas el próximo 20 de diciembre
La boutique, fundada en 1997 por Colette Roussaux, ha sido dirigida de forma magistral por su hija Sarah Andelman, quien ha mantenido siempre un muy alto nivel de exigencia. Su peculiar mezcla de productos de lifestyle con prendas de las más famosas firmas de lujo y el último grito del streetwear ha sido, sin duda, la clave de su éxito. Ella fue la primera en traer los diseños de Proenza Schouler, Mary Katrantzou o Rodarte. Y ella ha sido también, la primera en confirmar la noticia en la cuenta que Colette tiene en Instagram esta misma mañana.
Los 8.000 metros cuadrados que conforman Colette se habían convertido en un destino fijo para fashionistas, insiders y consumidores en general. Hasta el propio Karl Lagerfeld ha confirmado en alguna ocasión que era la única tienda a la que iba “por tener cosas que otras no conseguían”. Su amplio rango de productos, desde utensilios de cocina hasta joyería, pasando por cámaras fotográficas, revistas independientes o souvenirs hacían de Colette un punto de encuentro para todas las tendencias del momento. Tendencias que se mezclaban y se sentían cómodas.
Con lanzamientos exclusivos y productos especiales, que solo encontraban su sitio aquí, “Colette Roussaux cree que ha llegado el momento de tomarse un tiempo para sí misma; y Colette no puede existir sin la propia Colette”. Y sus seguidores lo confirman. Tanto ella como su hija daban el 100% a esta tienda.
EL NUEVO INQUILINO
Sin embargo, París no quiere dejar ese 213 de la Rue Saint-Honoré huérfano, porque también la ciudad (y el mundo de la moda) le cogió cariño a Colette, y fuentes de la boutique confirman que Saint Laurent está ya negociando el hacerse con su localización.
Estamos en negociaciones con Saint Laurent y estaríamos muy orgullosos de dejar el espacio en manos de una firma con toda la historia que tiene YSL detrás. Una casa con la que, además, hemos colaborado frecuentemente
Pero, se firme o no se firme el acuerdo, las colaboraciones y las ventas en Colette seguirán su curso hasta diciembre. Como la que le ha llevado a lanzar una colección cápsula el próximo 21 de agosto con H&M: H&M Studio x Colette, que estará a la venta, -tanto en la página web como en la tienda-, durante dos semanas; o las que ha realizado ya con firmas como Chanel o la propia Saint Laurent. De la misma forma que la tienda física, la página web también se apagará ese mismo 20 de diciembre. Au revoir Colette!