Muchos afirman que la vida del hijo de Rocío Jurado y Ortega Cano (62) es todo un drama. Hace unas semanas amanecimos con una inesperada portada en la que José Fernando (23) y Michu anunciaban su próxima paternidad. Pero desde entonces las informaciones y las consecuencias no se han hecho esperar.
Michu es el mayor error de la vida de José Fernando según su familia. Sobre todo para su hermana del alma, Gloria Camila (20), que al parecer, ha trazado una estrategia para separarla de su inseparable brother. Glo ka, como se hace llamar en las redes sociales, intenta aparentar 'compadecerse' de Michu, ayudarla y mostrarle que está a su lado, como cuando la visitó en el hospital tras perder al hijo - según dicen - para que se alejara de José Fernando y este pudiera recuperarse de sus recaídas. Lo cierto es que para los Ortega los baches y hundimientos del hermano mayor vienen dados por las malas influencias de Michu.
La chica que tiene robada 'la cordura' de José Fer solo buscaba 'echar el lazo' al hijo de la Jurado para convertirlo en su beneficio económico, según cree el círculo familiar del joven. Michu perdió el hijo, al parecer, días antes de la exclusiva a SEMANA. Dado que ese hecho sería causa de ruptura de contrato con la revista, la pareja decidió callárselo y seguir cobrando por su falsa noticia. Cuando la publicación rosa les pidió pruebas del embarazo, mostraron las partidas médicas de la Seguridad Social de cuando sí lo estaba, pero en tal documentación no aparecía información alguna sobre de cuántos meses de gestación estaba ni ningún dato sobre su evolución. "No es una invención, mi familia lo sabe" prometía el hijo de Ortega Cano en las líneas de la revista del corazón.
Mientras José Fernando intenta escurrir el bulto, las informaciones acerca de su estado actual son contrarias a lo que él dice. Se habla de su vuelta a los malos hábitos sobre los que él juró luchar para curarse y por los que hace unos días dijo que volvería a entrar en el centro de desintoxicación para lograr deshacerse de su problema; pero no, él ahora se presenta con otra versión. "Solo tuve una única recaída hace ya un tiempo" afirmaba hace dos días cuando fue preguntado en la puerta de su casa, por lo que no tiene intención alguna de ir a rehabilitación, sino que "seguirá tomando las pastillas".
En cuanto a las últimas filtraciones que aseguraban que la hermana de Michu había pegado a José Fernando, el propio protagonista se ha encargado de negarlo diciendo que "nadie me ha tratado mal, ni la hermana de Michu ni nadie de mi familia como se ha dicho". De hecho, el hijo de Ortega pretende ir a la boda de su hermana Rocío Carrasco (39) - pese a la mala relación de su clan con ella - a la que dice no ver motivo para no ir acompañado de su novia.
A pesar de que Gloria Camila se ha manifestado por activa y por pasiva en contra de Michu y asegurando que es ella la que desencamina la vida de su hermano, Jóse Fernando insiste en que su padre sí acepta a su pareja. Aunque no es un secreto que la familia Ortega no está de acuerdo con la relación de los jóvenes y ve a Michu como la culpable del deterioro del día a día de José Fer. Más aún ahora, que si hace unas semanas las sonrisas eran las protagonistas de una portada, ahora se habla de que el hijo de Rocío Jurado está malviviendo como okupa en una vivienda abandonada de Arcos de la Frontera. Un edificio en ruinas en el que los amigos de José Fernando "hacen cosas que no le vienen bien" a un chico que pretende limpiarse de su tonteo con las drogas. El joven ha abandonado las clínicas López Ibor e Instituto Galeano en tres ocasiones.
Y es que el hijo de Ortega no para de meterse en líos. Mientras se esperan las consecuencias por engañar a la publicación SEMANA, José Fernando continúa callado por el tema pero dejando entrever lo más que obvio. Ante preguntas como "¿vais a seguir adelante con el embarazo?" el joven no contesta, solo suelta una leve sonrisa que dice más de lo que calla, pero de su boca no sale ni una palabra. Al mismo tiempo asegura que en septiembre tiene previsto empezar a trabajar en Madrid y que aprovechará los fines de semana para bajar al sur y ver a Michu siempre que le sea posible.
Las contradicciones parecen la tónica de todo lo que envuelve a un José Fernando que "está perdidamente enamorado", según cuentan sus amigos de Arcos, por una relación en la que "ella busca lo que busca", continúa su círculo más cercano en referencia a Michu. Este guion digno de la telenovela más enredada - con villana, familias enfrentadas y roces con la ley incluidos - solo podrá tener el fin que su protagonista desee darle.