La vida de Pilar Rubio (38) ha dado un giro de 180 grados en apenas cuatro años. De ser pareja durante más de diez años del cantante heavy José Molinero ‘Molly’, con el que rompió en 2011, a madre de dos niños con el futbolista Sergio Ramos (30). Un cambio que le ha llevado a dejar atrás a la Pilar más alocada para dar paso a una más madura.

"Sergio me ha hecho ser más madura. Yo he sido muy alocada y con él he sentado la cabeza", confiesa a los medios durante la presentación de la nueva temporada de El Hormiguero, en la que volverá a ser colaboradora. "Hemos formado una familia, algo que no estaba en mis planes. Nunca había pensado en tener hijos o casarme".

Nunca había pensado en tener hijos o casarme

¿Y cómo ha sido eso posible? “Con Sergio ha sido la primera vez que he sentido que estaba enamorada. Me ha hecho descubrir esa parte de mí”, confiesa sincera. La presentadora y el futbolista celebraron precisamente hace unos días su cuarto aniversario con una cena con algunos amigos. “Me regaló algo muy bonito. Algo con mucha carga emotiva”.

También ha sido muy emotivo este pasado verano, el cuál describe como “de los mejores de mi vida ya que me encanta salir de España y he viajado. Me quedo con muchos momentos. Por ejemplo, disfrutar de mis hijos y mi pareja. Aunque lo mejor es que en todas las aguas que me he bañado estaba calentita”.

No obstante, a pesar del feliz momento que vive, Rubio descarta casarse.” Nunca nos lo hemos planteado”, comenta. Tampoco tener un tercer hijo… de momento. “Este año seguro que no. Si no tuviera que embarazarme, lo tendría”, bromea. El primero de sus hijos, Sergio, cumplió dos años en mayo, mientras que el segundo, Marcos, cumplirá uno en noviembre.

Preguntada por cómo está llevando Sergio la llegada de su hermanito, Rubio confiesa que “tiene celos. De hecho ahora está con un poco más celoso. Yo le digo que no los tenga, pero es más consciente de las cosas. Nosotros intentamos darle el mismo cariño a los dos y cuando estamos con Sergio intentamos hacer menos caso a Marcos”.

Su reto más difícil

También le enseña las pruebas a las que tiene que someterse en El Hormiguero. “Mi hijo flipa. Me paso el dia en casa ensayando y flipa bastante. Se queda quieto mirando a mamá e intenta imitarme. A veces pierdo tiempo enseñándole”.

Una de ellas, por ejemplo, fue la de apnea, en la que consiguió aguantar más de dos minutos sin respirar debajo del agua. Algo para lo que se preparo a conciencia. “Llevábamos con ello desde septiembre del año pasado. Pablo (Motos) hace apnea, pero para mi era algo nuevo. Lo puedes ensayar en tu casa, en el sofá. No se necesita una piscina”.

¿Le dice a todo que sí? “Alguna vez le has tenido que parar los pies”, bromea. “Pero yo soy tan kamikaze como él. Protesto al principio, pero al final lo intento. Por amor propio. Soy un poco competitiva, la verdad”.