Cuando Elsa Anka (50 años) era una de las presentadoras estrella, allá por los años 90, no se imaginaba que sus éxitos televisivos -numerosos e incuestionables por aquel entonces- se verían eclipsados dos décadas después por su hija mayor.
El caso de Lidia (22) es llamativo, ya que con su labor como colaboradora en apenas tres programas -todos ellos de Mediaset- ha logrado acaparar todas las miradas desbancando a su progenitora.
Polvo de estrellas, Noche noche, Sonría por favor, El gran juego de la oca y Todo en familia son algunos de los programas que resumen la trayectoria de Anka, que a finales de los 90 probó suerte como actriz. Años después llegó a participar en La isla de los famosos y a protagonizar una portada de Interviú. Posteriormente la presentadora centró su actividad en la televisión autonómica, donde ha permanecido hasta ahora, salvo algún cameo en los debates de Gran Hermano, el espacio en el que empezó su hija Lidia.
Los photocalls han sido otra de las actividades favoritas de Elsa Anka, quien recientemente recordaba con anhelo su paso por el debate de GH con una instantánea junto al presentador Jordi González (54). La fotografía generó confusión y algunos pensaron erróneamente en una vuelta de la presentadora a la primera línea de la televisión nacional. Ganas no le faltan.
Pero su hija le lleva la delantera. Ambas guardan, eso sí, un parecido físico asombroso aunque Lidia aglutina, si cabe, aún más belleza.
Estudiante de Publicidad y Relaciones Públicas, Lidia debutó en el cine con Blog, la ópera prima de Elena Trapé. En televisión se dio a conocer como colaboradora del debate de Gran Hermano 15, donde llegó incluso a entrar en la casa unos días con el fin de confundir a los habitantes. Tras esta incursión aterrizó en el debate posterior al programa Adán y Eva, que llevaba por nombre Pecadores.
La pasada primavera Cuatro volvía a recurrir a ella para su nuevo proyecto de citas, First Dates, presentado por Carlos Sobera (56), en el que éste ejerce de maitre de un restaurante al que acuden las parejas participantes. Torrent, por su parte, es una de las camareras.
En el mismo programa se encuentra su nueva pareja, Matías Roure, que se encarga de los cócteles del local. Precisamente en las últimas semanas los rumores acerca de un posible noviazgo les han perseguido sin que hubiese ninguna imagen que lo confirmara. Hasta ahora.
Este mismo lunes, las revistas del corazón publicaban por fin las pruebas que demuestran la relación entre ambos, un romance que ellos mismos se encargaron de negar en varias ocasiones. Las fotografías de la pareja dando rienda suelta a su amor en plena calle no dejan lugar a dudas: su relación va, de momento, viento en popa.