La familia quiere una tercera autopsia y se niega a incinerarla
"Nos estamos dejando mucho dinero en este proceso", declara el hermano de La Veneno a EL ESPAÑOL. Llevan gastados ya 7.200 euros en el Tanatorio Norte de Madrid.
30 noviembre, 2016 01:08Noticias relacionadas
Parecía que la segunda autopsia realizada a La Veneno este lunes cerraría la historia en torno a la cuestionada muerte de la vedette. Un broche final que terminaría echando una lazada a cualquier duda que hubiese en torno a su fallecimiento. Y, sin embargo, parece que la muerte de Cristina Ortiz, su nombre real, todavía seguirá coleando.
La familia de La Veneno está muy disgustada con el resultado que se ha extraído de la segunda prueba realizada al cuerpo. Tal y como ya publicase EL ESPAÑOL, el forense ha determinado que la artista murió de accidente doméstico después de haber recibido un golpe en la cabeza. Niega así que el cuerpo tuviese algún tipo de hematoma que pudiese sugerir algún forcejeo previo al asesinato.
Se procederá a pedir una tercera autopsia de forma privada
Es tal la negativa por parte de la familia a creerse este resultado después de lo que han visto en los últimos días que, después de hablar con su abogado, han decidido que no van a incinerar de forma inmediata el cuerpo de Cristina como era su primera intención. Francisco, el hermano de La Veneno, prefiere ser cauto y seguir dejando el cuerpo de la vedette en la cámara frigorífica del Tanatorio Norte de Madrid para hacerle más pruebas.
Como relata el familiar a modo de portavoz oficial, se procederá a pedir una tercera autopsia de forma privada para confirmar que, efectivamente, el cuerpo de Cristina no tiene los hematomas que ellos mismos vieron y en su momento quisieron incluso fotografiar. Después de llevar a cabo este examen se podrá proceder a la incineración.
"Nos estamos dejando una pasta en este proceso", declara el hermano de La Veneno. Y es que, cada día que pasa supone un gran desembolso de dinero para los familiares. El tener el cuerpo de Cristina en el tanatorio no es gratis. Cada día deben pagar 360 euros. Esto, teniendo en cuenta que la artista lleva allí desde el pasado 11 de noviembre, produce unos pagos que superan los 7.200 euros. Y parece que esta pesadilla todavía no tiene fecha final.
Unas fotografías que toman especial relevancia
Según apunta el hermano, todo parece indicar que este proceso terminará a finales de semana. En este caso, la tercera prueba no supone una autopsia como tal, sino una inspección del cuerpo a nivel visual. Al ser un proceso rápido, todo podría estar solucionado esta misma semana. Al menos, es lo que ellos desean. “Queremos que termine esto. Queremos dar descanso a mi hermana y cumplir su última voluntad”.
Este último deseo al que se refiere el hermano es el que pronunció su representante y biógrafa, Valeria, cuando fue preguntada por ello. Aseguró que La Veneno quería que la incinerasen y que sus cenizas fuesen esparcidas por el Parque del Oeste de Madrid “donde fue una puta feliz”. Aunque en un principio la familia no estaba muy de acuerdo con la idea, parece que han decidido cumplir con este deseo.
Las dudas en torno a este segundo resultado surgen desde el momento en que La Veneno entra en el Hospital Universitario La Paz y el equipo médico no informa inmediatamente a la Policía. “La investigación empezó a las 24 horas por culpa del hospital. Tuvimos que denunciarlo nosotros”, asegura el hermano de la artista.
Al ver que los médicos no informaban sobre el verdadero estado de Cristina y en el informe médico no aparecían los golpes que tenía por todo el cuerpo, algunos de sus hermanos decidieron hacer fotos para así recaudar pruebas con miras a una posible denuncia. Imágenes que han sido incluidas en la petición de esta tercera prueba. A causa de la realización de estas fotografías, la familia fue expulsada en su momento del centro médico y sólo fueron readmitidos cuando se confirmó que a La Veneno sólo le quedaban unas horas de vida.
Un mar de deudas
A este continuo pago por parte de la familia desde el fallecimiento de La Veneno se suma la impotencia de no poder quedarse con la casa de Cristina y en la que actualmente vive Alin, su novio. De momento, y ante su situación, la familia no pretende poner ninguna demanda para expulsarle de ese piso. Sin embargo, sí que le han pedido de forma verbal que abandone el domicilio.
Alin se ha negado a salir de la casa en la que vivió los últimos cuatro años con Cristina. De hecho ha llegado a decirles que si le pagan 2.000 euros está dispuesto a marcharse. De momento se niega a irse sin dinero entre las manos. Para poder subsistir, Alin ha decidido desprenderse de los objetos de valor de su novia vendiendo sus ropas y objetos personales a sus seguidores para poder comprar comida.
La familia está teniendo serios problemas para enfrentarse a este tipo de gastos y por eso se han interesado en conocer cuánto dinero tenía en el banco. Según la biógrafa, La Veneno tenía dos cuentas bancarias, una con 630 euros y una segunda en la que hizo los ingresos de la venta de libros y de su aparición en Sálvame Deluxe.