Los momentos más duros de Bimba Bosé en su lucha contra el cáncer

La salud de Bimba Bosé (41 años) no ha mejorado. La cantante y modelo, a la que fue diagnosticado un cáncer de mama hace dos años, continúa su tratamiento de quimioterapia y se ha sometido a nuevas pruebas. Así lo ha confirmado el entorno de la sobrina de Miguel Bosé (60) a EL ESPAÑOL. Parece que ni la medicina ni ninguno de los métodos modernos que ha probado están paliando su enfermedad. El pasado mes de agosto se realizó un nuevo tratamiento basado en la medicina hiperbárica, una especialidad con oxígeno a alta presión, que se ha sumado a las sesiones de quimioterapia a las que se somete en el Hospital Ramón y Cajal, donde se encuentran sus médicos, como ella misma ha explicado en más de una ocasión.

Bimba Bosé en la cámara hiperbárica Instagram

Bimba confesó hace unos meses que su cáncer estaba tan desarrollado, que tenía metástasis "en los huesos, en el hígado y en el cerebro". Aún así, ella nunca ha perdido la sonrisa y continúa luchando porque quiere vivir. "No he dejado de trabajar desde que me lo diagnosticaron y es lo que hay que hacer, la vida sigue. Debo estar hecha de otra pasta, la genética ayuda mucho. Además soy muy positiva, si no te derrumbas", afirmó Bimba recientemente en una entrevista. Aunque, sin duda, su actividad ha disminuido. En las redes sociales haces unos días que no publica nada, un hecho que llama la atención porque suele ser muy activa.

Su última imagen pública pertenece precisamente a la campaña contra el cáncer de Ausonia. Fue el pasado 8 de octubre y allí se puedo ver a Bimba, con lazo rosa en la cabeza, asegurando que había "llegado a querer a su cáncer". Este mismo día confirmó que aunque se encontraba bien, prefería no hablar de su diagnóstico "porque cambiaba cada día".

Durante la campaña contra el cáncer de Ausonia Instagram

Bimba Bosé vive actualmente en Sotogrande con su novio Charlie y con sus dos hijos: Dora y June. Decidió trasladarse a la exclusiva urbanización gaditana para llevar una vida más tranquila que en la capital española. Su familia, y por supuesto, sus amigos están siendo un gran apoyo para ella.

David Delfín (46), a quien la modelo considera como un hermano, es otro de los rostros conocidos que no atraviesa sus mejores navidades. Como ella, también padece esta enfermedad. Al diseñador tuvieron que extirparle tres tumores en la cabeza esta primavera y desde entonces está en un proceso lento de recuperación. Tampoco pierde la sonrisa y el buen humor como se deduce de la última imagen que publicó en su cuenta de Instagram y donde aparece comiéndose un churro en homenaje a Terelu.