Han pasado 17 años desde que el matador de toros Fran Rivera (43 años) y Eugenia Martínez de Irujo (48), duquesa de Montoro, se convirtieran en padres de Cayetana (17), o mejor dicho Tana. Pero aún hoy, cuando sólo faltan unos meses para que esta última alcance la mayoría de edad, continúa la guerra abierta acerca de su custodia.
Si hace unos días era el propio Rivera el que gritaba a los cuatro vientos (vía Twitter, eso sí) su disgusto por lo arduo que le resultaba cumplir el régimen de visitas establecido, ahora son su ex y su actual mujer las que han protagonizado un cruce de acusaciones públicas que han reabierto una herida enquistada sobre la custodia compartida de Tana.
"Basta ya", comenzaba diciendo el torero. "La custodia compartida es el derecho de vida de un hijo de poder convivir con sus padres por igual, sin que uno sea el dueño de su tiempo. Mientras no se ponga la custodia compartida por ley, la realidad es que hay y habrá abusos por la parte que obtenga la custodia. En este país un padre separado no obtiene un convenio, obtiene una condena y una multa a pagar. Los padres separados no queremos visitar a nuestros hijos, queremos criarlos y convivir un día a día con ellos. Que un padre separado no pueda tener el derecho a convivir el día a día con sus hijos se le está mutilando ese derecho de ser padre".
Las quejas de Rivera no quedaban ahí. "El no poder vivir ese día de mi hija mayor, me aleja de ella y me rompe el alma", escribía Rivera visiblemente enfadado por no haber podido acudir a la confirmación de su hija (en ese momento él se encontraba en México por motivos laborales).
Tras sus palabras, Eugenia Martínez de Irujo no pudo contenerse y contestó en una entrevista a su ex marido y padre de su hija. "A mí me parece fenomenal (la custodia compartida), nunca he estado en contra de eso. Siempre que sea posible. Lo que no es posible es que pase un mes de colegio en Sevilla y otro mes de colegio en Madrid. Es que eso no cabe en cabeza humana", contestaba tajante la duquesa de Montoro.
Ante la incursión de la ex de Rivera, su actual mujer, Lourdes Montes, tampoco pudo quedarse callada y sacó las uñas para defenderle. Lo hizo recurriendo a la misma vía que Martínez de Irujo. "Es que yo creo que es tan complicado... y al final siempre hay alguno que sale perdiendo. Yo creo que hay que intentar nivela el asunto y que ambos padres tengan el mismo derecho", señalaba tajante la abogada reconvertida en diseñadora.