La noticia de la separación entre David Bustamante (35 años) y Paula Echevarría (39) dejaba atónitos este lunes a los medios de comunicación y las redes sociales. La que hasta el momento podíamos calificar como la pareja de ensueño española, rebautizados también como los 'Brangelina' patrios, parece que han terminado de la misma manera que los hollywoodienses, cada uno por su lado.
JALEOS no se ha querido quedar únicamente con la no confirmación y el no desmentido de los protagonistas, y ha ido más allá. Tras analizar cientos de fotografías tomadas durante los 12 años de amor de la pareja, hemos caído en la cuenta de un detalle significativo que podría dar las pistas definitivas de que el distanciamiento de la pareja viene de lejos: sus alianzas de matrimonio.
El 22 de julio de 2006 la pareja de recién casados posaba radiante de felicidad a las puertas de la basílica de Covadonga rodeados de una gran multitud de curiosos y de decenas de fotógrafos que retrataban al joven y bello matrimonio. En uno de esos momentos de plenitud y alegría, David y Paula mostraron con orgullo a las cámaras sus manos derechas en las que lucían un idéntico anillo que les unía "hasta que la muerte los separe".
La pareja decidió volver a casarse un año después, pero esta vez por el rito balinés para celebrar el aniversario de su boda y por aquel entonces seguían aferrados a su anillo. Pasaron los años, y mientras se sucedían muestras de cariño continuas, interminables besos en la playa, arrumacos espontáneos paseando por la ciudad o miradas furtivas en los eventos a los que acudían, las alianzas se mantenían intactas en sus dedos anulares. Pero llegó finales de 2011 y con él la primera crisis de la que se hicieron eco los medios.
David Bustamante lanzaba su disco Mío en octubre de 2011 y junto al elepé sacaba cartelería, merchandising y un albúm de fotos en su web oficial repleta de imágenes en las que lucía cuerpo de gimnasio y alianza en su dedo. Sin embargo, en las primeras presentaciones de su nuevo proyecto, que se iniciaron entre los meses de noviembre y diciembre, el cántabro ya no tenía ninguna joya decorando sus manos.
Mientras sus fans le hacían firmar en la carátula de su disco y en camisetas con su foto en las que tenía aún su anillo de casado, la realidad era otra. Y es que algo ocurrió a finales de 2011, porque Paula siguió la estela de su marido un mes después.
El 2 de diciembre de 2011 la asturiana lucía la alianza en su mano derecha, dos días más tarde, ya no la tenía, y desde entonces no ha vuelto a ponérsela. Lo que pasó ese día es una incógnita, pero debió de ser algo que marcó a la actriz y al matrimonio para que ninguno de los dos volviera a lucir esa joya que representaba el símbolo de su unión y la promesa de amor eterno que se juraron cinco años antes.
Desde que ocurriera este detalle localizado por JALEOS y que, casualidad o no, coincide con la primera crisis conocida de la pareja, las informaciones de nuevos baches en su romance y las evidencias de distanciamiento han ido en aumento, aunque tampoco han faltado fotos intentando mostrar su historia de amor idílica en las redes sociales. Sin embargo, la nueva crisis que ha saltado estos días parece augurar el adiós definitivo del matrimonio. Pero, ¿qué pasaría ese mes de diciembre de 2011 para que decidieran ambos a la vez deshacerse de sus alianzas?