Ana Boyer (27 años) y Fernando Verdasco (33) pasarán por el altar después de cuatro años de una intensa relación. Así lo han anunciado ellos mismos asegurando que es un paso en el que llevaban tiempo pensando.
Desde que la pareja comenzó su relación en 2013, han recorrido el mundo entero. Fernando eligió uno de estos destinos paradisíacos para hacer la gran pregunta: "Estábamos de viaje en la playa, y una mañana, Fernando me lo pidió dándome un anillo", ha comentado Ana Boyer en la revista ¡Hola!, donde han hecho el anuncio oficial. Eso sí, la hija de Isabel Preysler y Miguel Boyer aclara que los detalles de la boda todavía no se han concretado, ni siquiera la fecha.
Fernando asegura que no fue una decisión precipitada, sino que "llevaba tiempo queriendo pedírselo. Ese día me desperté y sentí que era el momento". Comenta que fue una decisión acertada: "Ahora estoy muy feliz de haber dado el paso y toca pensar cómo queremos hacerlo".
La pareja ha sabido complementarse desde el inicio de su relación, por lo que era natural que este fuera el paso a dar. El propio tenista afirma: "Me encanta cómo hemos congeniado siempre, lo que mucho que nos reímos juntos y tener a mi lado a alguien que me hace así de feliz".
Respecto a la familia, según cuentan los prometidos todo ha saldo a pedir de boca. Ana explica que "se pusieron todos muy felices cuando se enteraron de la noticia". Al parecer ellos también se llevan muy bien con el joven y, sobre todo, ven muy feliz a Ana que "es lo más importante".
Historia de amor en el peor momento de Ana
El verano de 2013 Ana Boyer estaba viviendo uno de los peores momentos de su vida. Su padre, Miguel Boyer, estaba convaleciente tras sufrir un derrame el año anterior. En ese tiempo, tanto la joven como su madre Isabel Preysler (66) permanecieron a su lado.
Para tratar de despejarse, Ana hizo una escapada al mediterráneo en lo que sería un viaje que nunca olvidaría, ya que fue allí donde conoció a Fernando Verdasco, con quien saltó la chispa y poco a poco se convirtió en el amor de su vida.
Fernando fue el mejor apoyo para Ana cuando su padre falleció, pero también lo fue en los momentos más felices cuando recorrieron juntos el mundo, a fin de evitar que la distancia fuera un obstáculo para la relación: México, Bahamas, Miami, Argentina, París, Moustique…
Una vida de lujo viajando por el mundo
Desde que Ana Boyer dejó su trabajo para acompañar al tenista en sus viajes, la hija de Isabel Preysler está disfrutando de una vida llena de lujos en los entornos más exóticos y paradisíacos del planeta, según se puede comprobar en su cuenta de Instagram.
La pareja actualmente tiene su residencia en Qatar, motivado sobre todo por cuestiones comerciales (le regalaron la casa en Doha a cambio de que el deportista promocionara la ciudad). Algunos expertos aseguran que esta decisión se debe a que al deportista le quedan pocos años en el mundo del tenis y estaría buscando otras salidas profesionales.
Estos viajes y la distancia que les separa de su familia no son un impedimento, ya que la pareja no duda en coger un avión para trasladarse a la otra punta del mundo y ver a los suyos.
[Más información: La dolce (y lujosa) vita de Ana Boyer siguiendo a Fernando Verdasco]