"Estamos tan a gustito...", "Antes riojanos que murcianos" o "Viernes de dolores... sábados de resaca". Son algunas de las expresiones que adornaban un polémico anuncio satírico promocional de Mongolia, el Musical, un evento que a finales de 2016 provocó tal enfado del torero José Ortega Cano (63 años) por lo que consideró una vulneración a su derecho al honor y a la propia imagen que terminó por demandar a la revista responsable. Ahora, la publicación ha anunciado, recurriendo al mismo tono satírico que caracterizan sus informaciones, que su supervivencia está amenazada después de que el diestro les exija 40.000 euros en concepto de indemnización.
La decisión de Ortega supone, tal y como aseguran la propia publicación, "una amenaza muy importante para la supervivencia de Mongolia". Por ello, con su humor habitual aseguran que tienen que poner en marcha "una campaña de micromecenazgo próximamente" para lograr apoyo financiero y poder financiar los costes del juicio para asegurar su pervivencia.
El matador de toros, que se casará con su novia el año que viene, está muy disgustado por el uso de su imagen para ilustrar el citado cartel a finales de 2016. En él aparece su rostro sobre el cuerpo de un marciano murciano haciendo referencia a algunas de las expresiones que popularizó el propio Ortega Cano allá por los años 90, así como a ciertas frases que para el torero resultan objeto de burla y escarnio por hacer referencia a su accidente de tráfico, mientras que para Mongolia responden a la libertad de expresión sobre una persona pública.
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La demanda que presentó el diestro contra la publicación se traduce ahora en esos 40.000 euros y en un encuentro en los tribunales que se producirá el próximo 15 de noviembre en el Juzgado número 3 de Alcobendas. Allí se verán las caras Ortega Cano y los responsables de la editorial.
Lo cierto es que ésta no es la única ocasión en la que las manifestaciones de Mongolia han resultado controvertidas. En los carteles promocionales de sus eventos proliferan rostros conocidos como Mario Vargas Llosa (81), Ana Botella (64), Franco o Rita Barberá.
Una de las polémicas más sonadas tuvo lugar también el año pasado. En aquella ocasión, aparecía una imagen de la Virgen de la Caridad para promocionar un espectáculo también en Cartagena. En el rostro de la Virgen habían colocado el de Donald Trump (70), y en el del Cristo, la de Hillary Clinton (69).