Los colaboradores de Sálvame no son amigos ni enemigos ni viceversa. Las continuas idas y venidas en sus relaciones de compañerismo (o no) quedan patentes en sus diversas disputas en plató y con la marcha de Kiko Matamoros (60 años) -uno de los componentes más fuertes del Eje del Mal- las posiciones han quedado más claras que nunca.
El marido de Makoke (47) ha dejado claro su desencanto con Belén Esteban (43), con la que durante años mantuvo una relación cordial e incluso de protección hasta que los 'problemas de familia' de Matamoros entraron en juego y su hija Laura (24) entrara en Gran Hermano VIP. Entonces, la 'princesa del pueblo' se posicionó del lado de la joven y su hermano y en contra del colaborador y su esposa, lo que produjo constantes reproches en plató.
Hoy esos reproches se han convertido en ataques directos en ambos sentidos. Todo comenzaba con la pregunta de Jorge Javier Vázquez (47) a Matamoros sobre lo que este pensaba de sus ya excompañeros y más concretamente sobre Belén: "Me parece un personaje valleinclanesco, porque es una enemiga de la inteligencia".
Más tarde el padre de Diego y Laura añadía: "Nunca he dicho que Belén Esteban fuera analfabeta, pero sí que podría cultivarse más. Belén representa a esa España tétrica que detesto. Pero también he dicho siempre que si yo fuera un tipo culto, no habría estado trabajando aquí".
Pero la aludida no se ha quedado callada. Lejos de despedir a Matamoros con su característico "hasta luego, Maricarmen", la de Paracuellos ha contestado a los comentarios de Kiko sobre su inteligencia: "¿Y él qué carrera tiene? La misma que la mía. La carrera televisiva". Coincide con Kiko en que si tuviera más altas capacidades no estaría en el plató de Telecinco, pero es consciente de lo que puede hacer: "Cada uno tiene unas metas en la vida. Yo sé dónde trabajo. Si hubiera estudiado hubiera sido una ejecutiva tremenda, aunque política, no".
Mila Ximénez (65), miembro también del Eje del Mal, le ha mostrado su apoyo a Belén porque ella también "se considera una víctima de Matamoros". Pero por el momento no sabe si le echará de menos o no, porque aunque afirma que ha habido "muchos buenos momentos" también los malos le han marcado bastante. En la misma línea se sitúa Belén, pero esta lo tiene más claro: "Mentiría si dijese que no le voy a echar de menos. Pero también voy a estar más tranquila".