Jordi Estadella, el popular presentador, falleció el 30 de abril de 2010 víctima de un cáncer de hígado. Desde entonces, su viuda y su primera esposa mantienen una batalla legal por su pensión. Ninguna de las dos están dispuestas a perder lo que a su entender les corresponde. Hasta tal punto es la situación, que han llevado su caso hasta el Tribunal Constitucional.
Susana Vicárregui y Elisa Ruiz son las dos esposas del desaparecido presentador Jordi Estadella. Susana fue su primera esposa, de la que se divorció tras años de matrimonio. Luego conoció a Elisa, con quien se casó y quien era su esposa cuando falleció. Ambas mantienen una pugna legal desde que falleció el presentador de programa como Un, dos tres… responda otra vez y No te rías que es peor. En estos momentos están a la espera de que el Tribunal Constitucional decida quién de las dos tiene la razón para cobrar la totalidad de la pensión de viudedad.
Elisa, su segunda mujer, está dispuesta a llegar al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo para poder percibir íntegramente la pensión de viudedad de Estadella, que en estos momentos está compartiendo con la primera esposa. En un primer lugar, un juez de primera instancia consideró que era ella quien tenía que percibir la pensión de viudedad, pero la primera esposa recurrió y a día de hoy comparten la pensión a la espera de lo que diga el Tribunal Constitucional. Elisa tiene muy claro que “solo puede existir una viuda, la que está casada con el difunto en el momento del fallecimiento”, asegura en conversación con JALEOS.
Elisa está dispuesta a luchar con todas sus fuerzas y todos los derechos que le concede la ley por ella y por su hijo, Mauro, que "tenía solo cuatro añitos cuando falleció Jordi". La Seguridad Social, tras ganar un recurso en los tribunales, les obliga a repartir la pensión que queda de su marido.
Elisa Ruiz no entiende que "la primera mujer tenga derecho a una parte de la pensión de viudedad cuando el matrimonio es un contrato entre las partes y se ha roto definitivamente con el divorcio en cuyo acto judicial se reparten todos los bienes y derechos de la pareja”. Le alegan que para percibir la totalidad de la pensión la viuda tiene que llevar casada más de diez años y ella solo llevaba seis. Eso si, más siete años como pareja de hecho, cosa que al parecer no se tiene en cuenta. “En un principio un juez me concedió la pensión completa a mí, pero cuando recurrieron Susana y la Seguridad Social todo cambió. Me queda el 40% de la pensión. El otro 60% es para su primera mujer".
Elisa y Jordi estuvieron casados desde el 20 de marzo de 2004 hasta el 30 de abril de 2010 que el presentador falleció, pero llevaban juntos desde el año 1997. Según ella "el ser pareja de hecho no cuenta para nada para la Seguridad Social. Jordi tuvo que luchar mucho para conseguir el divorcio y podernos casar".
Los hijos que Jordi tuvo con su primera mujer tenían 30 y 24 años cuando murió. Susana y Jordi estuvieron casados 24 años. "Las segundas esposas y los hijos de un segundo matrimonio somos de segunda clase. Me quedan 290,74 euros de pensión". Dice que ya se lo avisó el presentador: "Cuando Jordi estaba malito en el hospital me decía ‘agárrate bien porque esta tía no te va a dejar hasta que se muera’. Yo no me podía ni imaginar todo esto".
Muy presente en su día a día
Asegura que aún le echa mucho de menos. "Es como si siguiera viviendo con él. Hago las mismas cosas que hacíamos juntos. Veo las mismas películas que veía con él, sigo escuchando la música que le ponía en los programas de radio y tengo al niño, que ya tiene 11 años, y me lo recuerda continuamente. Vivo el mismo mundo que vivía con él”. Sobre el pequeño, dice que le gustaría que siguiera los pasos de su padre. "Va por el mismo camino. Le gusta mucho el mundo de la tele y el cine. Se interesa mucho por estos mundos. Se acuerda mucho de su padre y de todo lo que hacía y decía".
Aún así, Elisa no descarta la posibilidad de enamorarse de nuevo. "Yo en estos momentos siempre tengo presente a mi marido, pero si viene alguien no le diré que no. Si viene y me gusta probablemente me tiraré al pozo, pero no es una cosa primordial para mi. Ahora estoy muy ocupada porque tengo un niño pequeño y también estoy pendiente de mi madre, que tiene 81años".