Penélope Cruz (43 años) ha mostrado a los ingleses su 'raza española' en todos los sentidos. La actriz de Alcobendas, que ha dejado claro ante los flashes por qué la presentan como una de las mujeres más bellas del mundo, no ha dudado en posar con un corsé lencero o directamente desnuda pero insinuando más que enseñando.
Lo que no ha escondido en ningún momento es su adoración por España y lo que le gusta volver a su tierra. "La comida, la cultura y aquí están mi madre y mi hermana", afirma la madrileña al ser preguntada por Esquire sobre lo que destacaría de su país. Pero lo que más echa de menos de nuestras costumbres y que no encuentra en Los Ángeles es: "La forma en la que hablamos los españoles. Cuando somos muchos y todos hablamos a la vez. ¡Me encanta, lo adoro!".
Penélope ha pasado el verano grabando la serie de televisión, El asesinato de Gianni Versace, en la que da vida a la diseñadora italiana Donatella Versace. El rodaje es en California, donde a pesar de encontrarse a gusto, no logra la comodidad que encuentra en Madrid: "Yo soy de las que voy al supermercado, de paseo, de un sitio a otro. Eso es por lo que prefiero vivir aquí. Los Ángeles es difícil. Amo Los Ángeles, Estados Unidos y Londres pero tienes que vivir en un lugar donde puedas tener una vida normal".
Y es que ella siempre reivindica su barrio de origen, Alcobendas. Pese a vivir inmensa en la 'purpurina' de Hollywood, ella siempre ha preferido hacer su día a día de forma más discreta y quedarse únicamente con lo que la meca del cine estadounidense le ofrezca en el sentido profesional.
En este sentido, una de las preguntas del periodista de Esquire confundió a una Penélope muy alerta con lo que se diga de ella. "¿Los directores de Hollywood, en los primeros años de su carrera en Estados Unidos, no entendieron cómo usarla correctamente, debido a su belleza y su acento, tan exóticos para los ojos y los oídos anglófonos", a lo que ella respondió: "¿Como que me usaron?". La actriz le hizo saber entonces al comunicador que parecía que estaba sugiriendo "que fue explotada", cosa que no iba a aceptar y menos con los escándalos que están saliendo en los últimos días relacionados con el mundo de los jefes del cine y las actrices.
La española no se quedó callada ante la ola de compañeras de profesión que han salido estos días hablando de su experiencia con Harvey Weinstein por quien se sintieron acosadas. Cruz ganó el Oscar gracias al trabajo en una película del productor y asegura que no vivió en primera persona nada de eso, aunque no duda en mostrar todo su apoyo a las actrices que lo han contado y rechazar este tipo de actitudes machistas en cualquier ámbito.