Bertín Osborne (62 años) y Arévalo (70) han enterrado el hacha de guerra y por fin vuelven a ser amigos. Después de las disputas que han protagonizado a raíz de que el cómico hiciera pública una fotografía de una comida informal con el rey, los amigos han decidido zanjar sus disputas de forma definitiva.
Osborne ha dado su brazo a torcer y ha invitado al cómico a uno de sus conciertos el sábado a la noche. Aunque Arévalo no puede acudir a dicho evento, los dos amigos ya han puesto una nueva fecha para quedar próximamente y terminar de zanjar sus diferencias, según ha asegurado el propio cómico.
El presentador llevaba desde julio sin hablar con su amigo a raíz de la fotografía antes mencionada, a la que llegó a referirse en estos términos: "Quita la puta foto esa". Bertín solo se comunicaba con Arévalo a través de Whatsapp respondiendo con escuetos mensajes de "sí" o "no"
Amigos desde hace décadas
En todo este tiempo, el humorista ha querido mostrar públicamente su arrepentimiento: "Tuve la mala fortuna de poner una fotografía en Twitter, pero lo hice con toda la normalidad, presumiendo de ser español", en referencia a los invitados a la comida, sobre todo a Juan Carlos I (79). "Tenía que haberle pedido permiso a él", ha añadido.
Sin embargo, ninguno de los intentos de acercamiento por parte de Arévalo han tenido éxito, a pesar de que ambos llevan décadas compartiendo escenarios, giras, proyectos empresariales y programas. Bertín, además haber evitado todo tipo de aproximación para intentar solucionar la disputa, había eliminado las apariciones del humorista en el programa Mi casa es la tuya, el espacio en el que poco a poco Arévalo iba adquiriendo más protagonismo. El presentador tomó esta decisión después de que el humorista concediera una entrevista en Sábado Deluxe donde hizo pública esta disputa.
Para Bertín el problema residía en que al colgar esa fotografía "en redes me está faltando el respeto a mí, a mi mujer y a mis amigos que estaban allí, porque es mi casa. Y por supuesto al rey y la infanta", según las propias palabras que el presentador transmitió a la periodista Paloma García Pelayo.
No obstante, el tiempo transcurrido y la mediación de María Teresa Campos para poner paz entre los dos parecen haber allando el terreno lo suficiente para que, finalmente, los dos amigos se reconcilien.
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