Los familiares de Gregorio Esteban Sánchez Fernández, más conocido como Chiquito de la Calzada, han solicitado conocer el contenido del testamento del cómico. Este escrito suscita un gran interés tanto de los familiares como de los medios, ya que el humorista no tenía ningún hijo a quien legar el extenso patrimonio que amasó en sus más de 20 años de duro trabajo sobre los escenarios.
Teniendo en cuenta que no tenía ninguna obligatoriedad a la hora de disponer de sus bienes, Chiquito nombró a su sobrina Loli, la hija de su hermano mayor Paco (también fallecido), como heredera universal. La mujer mantenía una relación muy estrecha tanto con el humorista como con su mujer Pepita, a quienes cuidó durante los últimos años.
Loli es una mujer anónima, que siempre ha preferido mantenerse al margen de la atención mediática que rodeó a su tío. Incluso durante la misa celebrada en la iglesia malagueña del Cautivo, donde se daba el último adiós a Chiquito, ella no actuó como portavoz de la familia.
Un patrimonio considerable
Chiquito de la Calzada fue un hombre que trabajó durante muchos años de manera incansable, lo cual le reportó una gran fortuna que, además, supo gestionar sabiamente. Según ha contado Jesús Manuel Ruiz en el programa Sálvame no suena descabellado hablar de una cifra cercana a los cuatro millones de euros. "Me imagino que sí, y muchas propiedades".
Respecto a las propiedades, según los datos que se desprenden del Registro de la Propiedad, el matrimonio poseía un apartamento en pleno paseo marítimo Antonio Machado de Málaga, una de las zonas más valoradas de la ciudad ya que se encuentra a pleno pie de calle.
Esta casa, que mide casi 200 metros cuadrados, cuenta con un vestíbulo, un salón-comedor, cocina, lavadero, dos cuartos de baño, aseos, tres dormitorios y, para poder disfrutar de las magníficas vistas, una amplia terraza. Una vivienda que, teniendo en cuenta el precio del metro cuadrado en esa zona, podría estar valorada en 400.000 euros. No obstante, la casa no viene sola, ya que Chiquito también poseía dos plazas de garaje de 31 metros cuadrados cada una y situadas en el garaje del mismo edificio.
Además de esta vivienda no se conocen otras propiedades a nombre del humorista o de su mujer. Sin embargo, no se puede desmerecer los distintos objetos y recuerdos que el matrimonio poseía.
En este sentido, una de las pertenencias sobre las que más se ha hablado son las joyas que poseía la propia Pepita, además del propio dinero que el humorista habría conseguido ahorrar en todos estos años. Como el propio Jesús Manuel afirma, hay que tener en cuenta que el malagueño trabajó durante 23 años en la mejor época de la televisión. De ahí que no suene descabellado que la cifra pueda rondar los millones de euros.
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