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    Majestuoso patio con fuente central y vegetación.

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    Porche de lujo con columnas, gran entrada de cristal y cómodas butacas.

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    Fachada con la gran piscina al frente y palmeras y jardín rodeando la vivienda.

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    La entrada da directamente a dos zonas de escaleras en mármol que dan al resto de estancias de la mansión.

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    Lujoso salón en tonos dorados, blancos y madera.

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    Una de las perspectivas del interior de la casa.

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    El estilo mallorquino e isleño queda patente en los colores y los techos claros.

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    Zona chill out en una de las terrazas con vistas al gran jardín.

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    Salita donde reina la comodidad y los tonos beiges en la que combinan estampado sofás y cortinas.

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    Detalle de los arcos de la fechada y el porche.

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    Zona del comedor siguiendo la línea de decoración de la vivienda. Destacan la inmensa mesa y la lámpara de estilo clásico.

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    Una de las habitaciones. El blanco y dorado vuelve a reinar.

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    Cuando la anochece, las zonas del exterior de la casa son las más atractivas.

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    La cocina. También en tonos arena y destaca el metal de los modernos electrodomésticos.

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    El baño con una protagonista central: la bañera.

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    Otra de las habitaciones de la vivienda.

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    La escalera que conecta la zona exterior con la interior.