Paula Echevarría (40 años) ya hace su vida familiar junto a Miguel Torres (31) y busca alejarse de su pasado. Precisamente mientras disfrutaba de un puente de mayo en Málaga junto a su hija Daniella y su novio, los medios se hacían eco de la posible vuelta de Ares Teixidó (31) y David Bustamante (36). La presentadora y el cantante habrían retomado sus encuentros en el ático madrileño del cántabro. Una forma en la que el ex triunfito habría querido pasar página tras su divorcio y continuar su vida junto a otra mujer, pero ¿son tan diferentes Ares y Paula? La catalana da cada vez más muestras de querer parecerse a la asturiana.
JALEOS se ha percatado de la similitud que existe entre muchas de las fotografías que publican Paula y Ares en sus redes sociales: comparten poses, estilismos, accesorios, parecidos escenarios, gestos... ¿Pura casualidad o es intencionado?
De perfil y con sombrero
Una sonriente, otra seria; fondo de ladrillos frente a anochecer en la naturaleza. Pero fíjense en las protagonistas: foto de perfil y sin que falte el accesorio de moda de este pasado otoño, el sombrero negro. Paula es muy adicta a los complementos que van sobre la cabeza pero Ares no solía utilizarlos hasta ahora...
La melena sobre la cara
Cuando llega el buen tiempo el secador de pelo es lo más molesto para las mujeres, así que nada mejor que dejar que la humedad desaparezca gracias a la brisa natural. Hasta ahí todo normal, pero ¿a qué viene echarse varios mechones sobre la cara? Parece que es el mejor truco de Paula y Ares para sacarse una foto cuando no van maquilladas.
Mirada hacia atrás
Este gesto está prácticamente registrado por Elsa Pataky (42), ya que es su movimiento habitual en los photocalls. Paula Echevarría ha querido seguir sus pasos y así mostrar la parte posterior de su albornoz, y Ares copió a la actriz para mostrar a sus seguidores las flores bordadas de su chaqueta vaquera.
Escaleras y abrigos de pelo
El efecto callejero-glam era lo que ambas querían transmitir con estas instantáneas. Paula se sacó esta foto en el Soho neoyorquino, mientras Ares se la sacó en Barcelona. No obstante, las dos han querido vestirse con su abrigo más llamativo y sentarse a ras del suelo, en un escalón de la acera, una actitud underground en contraste con sus estilismos más cuidados.
El postre instagramer
Nadie se cree que Paula se comiera todo ese batido con helado que muestra en la foto, pero eso de mostrar comida deliciosa es algo muy habitual entre los influencers. Ares ha imitado a la actriz de una forma más modesta y sin exceso de azúcar. Eso sí, que el tarro de cristal y la pajita no falten.
Como niñas
Paula es más de Disneyland París y Ares de PortAventura. Sin embargo, ninguna de ellas se resiste a posar y tocar a sus ídolos de la infancia. La exmujer de Bustamante se fotografía junto a Minnie Mouse mientras la supuesta nueva conquista del cantante prefiere aferrarse al Pájaro Loco. Las amplias sonrisas en ambos casos son idénticas.
Trabajando en el sofá
Las dos se dedican a repasar guiones. Paula por su trabajo de actriz aprende su papel relajada en un cómodo sofá, y Ares mira la escaleta del programa del día siguiente y estudia las frases escritas por los guionistas rodeada de cojines. Sus profesiones les permiten tener ratos así, tumbadas pero al mismo tiempo sin parar de trabajar.
Un chándal sobre pared
Desconocemos si hicieron ejercicio o no, pero al menos la foto de postureo la tienen, aunque no en un gimnasio, sino apoyadas sobre una pared de ladrillo y cemento. a juzgar por las imágenes, parece que cuando Ares se sacó la foto hacía más frío que cuando se la hizo Paula, pero la idea que tuvieron ambas fue la misma.
Piscina y mirada perdida
El agua cristalina de las piscinas siempre es un fondo idóneo para cualquier foto. El retrato de Paula es más tropical y el de Ares más urbano, pero posan frente al agua como si fueran las reinas del lugar. Paula, que tiene 20 veces más seguidores que Ares, posa con la mira hacia arriba, como mostrando su poder, mientras la catalana mira hacia abajo, queriendo mostrar que aún no puede permitirse ser tan 'diva' como la asturiana.