Carlota Corredera (43 años) ha celebrado este viernes su quinto aniversario de boda con Carlos de la Maza. La pareja lleva varios años de relación y tiene una hija en común, Alba.
La presentadora quiso conmemorar este aniversario con una fotografía a través de su Instagram en la que aparece de espalda, con un vestido de novia con pedrería en los hombros, el pelo suelto ondulado con detalles ornamentales en el cabello. Junto a la imagen escribió un emotivo comentario: "Cinco años de este día, los mejores cinco años de mi vida, te amo, os amo".
A su boda en la azotea del hotel Gran Vía 2 acudieron sus amigos y familiares más cercanos, entre los que se encontraban los principales rostros de Sálvame, como Jorge Javier Vázquez (47) y Belén Esteban (44).
Carlota y Carlos se conocieron a través de las redes sociales, a pesar de que ambos trabajaban en lo mismo, ella como directora de programa y él uno de los cámaras. Sus interacciones a través de los perfiles se reducían a un like o un comentario esporádico, hasta que la gallega se atrevió animada por sus compañeros a contestarle.
La periodista desveló en su libro, Tú también puedes, que lo que más le atrajo de él fue que es "una persona íntegra, honesta, con principios muy sólidos y amigos de sus amigos".
Aunque su físico tampoco se quedaba atrás: "Es un hombre muy atractivo del que yo tenía referencias por amigos comunes, del que todo el mundo hablaba muy bien. Valores que, a la hora de formar una familia o tener una vida y proyectos en común, eran muy importantes para mí", aseguró Carlota en una entrevista a Diez Minutos.
Desde que pasó por el altar con Carlos su vida ha cambiado drásticamente. En lo personal, tuvo a su hija Alba."Es muy bonita, es muy emocionante porque es una niña muy deseada... Estamos completamente felices", señaló Carlota al borde de las lágrimas el día de su alumbramiento.
Mientras, en lo profesional su presencia en la televisión ha aumentado año tras año, consiguiendo ser una de las presentadoras de referencia de Sálvame entre otros proyectos.
A diferencia de Carlota Corredera, Carlos prefiere estar detrás de las cámaras y es muy celoso de su intimidad. Las únicas veces que se ha mostrado en público ha sido momentos señalados, como el día de su boda o el nacimiento de su hija.
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