El próximo 23 de septiembre se cumplirán 15 años desde que a nuestras vidas llegase una anónima mujer de 31 años, de Salou (suyo en propiedad), y que conquistó el corazón de millones de espectadores por su espontánea ingenuidad y sus inusuales maneras de desenvolverse.
Núria Yáñez (46 años), conocida cariñosamente como 'Fresita' por su amor al color rosa, ganó la quinta edición de Gran Hermano, el reality de convivencia por antonomasia en España. Poco duró aquella máscara de niña buena en el cuerpo de una mujer madura, o al menos eso pretendieron dibujar los que la tacharon de estratega, mala actriz y mentirosa. Pero, ¿cómo es realmente Núria Yáñez? ¿Conocemos a la auténtica Fresita?
¿Cree que conocemos a Fresita?
Yo soy como soy. Me crié con Lina Morgan, me gusta la alegría... Me he tenido que adaptar a la maldad de la sociedad, la gente me ha preguntado miles de veces si soy así... Ya no hay valores, la gente solo piensa en el estar guapo, el 'postureo', el fingir... Durante un tiempo iba en chándal por mi pueblo y me decían que era una creída, ahora me ven y saben que no he hecho montajes... Besan por donde piso porque saben que he sufrido mucho. El señor Kiko Hernández (41) me insultó, me mancilló mi personalidad... Me tuve que retirar de la televisión.
¿Cómo recuerda su experiencia dentro de Gran Hermano?
Fue como estar de camping con 13 personas. Me lo tomé como un trabajo. De hecho, tú estás trabajando: te ponen pruebas para ponerte al límite, se te van amigos, tienes que cumplir una disciplinas, no tienes tus cremas hidratantes... Ahí estaba bien, pero lo que más me ha marcado ha sido después. Yo soy flower power y vengo de una familia humilde.
Fue una edición para recordar... Nico, Ainhoa, Julián... Y Aída Nízar, con quien en un principio se llevó muy bien.
Yo soy tímida, de pequeña era muy tímida, tiendo a ir con gente más fuerte que yo por eso conecté con Aída. Pero cuando salí vi realmente que se había convertido en una envidiosa, ahí me di cuenta de la realidad. Aída me tenía envidia. Al salir, mis bolos eran muy cotizados y los suyos estaban por los suelos.
Ella es feliz con la televisión, ahora triunfando en Italia.
Aída no tiene límites, pero cada uno con su conciencia. A ver, la televisión es droga dura. Droga muy dura. Gente que se casa porque son los dos conocidos y así hacen portadas... Yo soy la realidad caminando cada día, cogiendo mi autobús, mi tupper, mi sueldo de mileurista... La tele es el peor trabajo del mundo si lo quieres de larga duración. La tele no dura para siempre. Es temporal. Es veneno. Es droga. Es una enfermedad. ¿Cómo quieres que vaya a la tele? ¿Diciendo que me han maltratado, como otras, para que la lleven a realities? ¡Qué vergüenza!
Bueno, en su época pagaban cantidades brutales por colaboración...
Yo solo hice cuatro programas, pero bonitos y bien pagados. No fui a Crónicas Marcianas donde me ofrecían 25.000 euros porque me daba miedo enfrentarme a cuatro peleas de gatas. Yo fui a Jesús Quintero (77) a Sevilla y lo hice gratis. También me ofrecieron un polígrafo por muchísimo dinero pero dije que no porque tenía que hablar de mi vida sexual.
En septiembre se cumplirán 15 años desde que llegó a nuestras vidas, ¿cree que ya es hora de que le den la etiqueta de VIP y la llamen para su nueva edición?
Si me llaman, voy. Pero iría flower power rebelde, nada que sea en contra de mis principios... Estaría bien, aunque yo soy más de Supervivientes.
Hemos leído en prensa que no tiene miedo a hablar de sus ideologías políticas.
Desde el mes de mayo soy apolítica. Y sí, he podido sentir una simpatía por Pablo Iglesias (39), pero ahora lo que me gusta de uno, no me gusta del otro. Me han llegado a amenazar... paso de la política. Soy española, y catalana. No considero a Cataluña independiente, tenemos que ser hermanos, estamos perdiendo el tiempo discutiendo cuando hay hambre, exclusión social, gente sin trabajo... Hemos hecho un retroceso, Barcelona ha perdido turismo... ¡A mí me encanta el pan tumaca!
Compagina su trabajo en una multinacional textil en la que lleva fija dos años con su trabajo de presentadora de un programa de radio en Barcelona, junto a su director y Jordi González: Va de tele, ¿cómo va ese proyecto?
Hay que reinventarse. Cada día es uno nuevo y hay que exprimir la vida al máximo. Mira Terelu. Yo la vi hace un año y medio, que estuve en Qué tiempo tan feliz y estaba guapísima. Me entrevistó con mucho cariño, se me saltan hasta las lágrimas... Allí canté mi canción Eo, que nació con un mensaje de positividad y de "arriba la gente". María Teresa y ella me aplaudieron mucho... Se la dedico.
Nuria, ¿y en el amor?
¡Ya tengo mi anillo! Y si Dios quiere, el año que viene me caso. Te lo cuento en exclusiva. Será en Salou, en la playa, con un vestido bonito, que venga toda mi familia, por la iglesia porque soy muy tradicional, pero también muy flower, playera... Y con mucha alegría... He estado mucho tiempo sola. Pero ahora soy feliz. Me he enamorado de un donjuán retirado, mi Julio Iglesias (74), moreno, alto, guapísimo, cincuentón, vivo el amor, Dios me ayuda...
¿Cómo lo conoció?
Era un amigo de juventud, con 18 años yo lo veía aquí en Salou, un poco más mayor que yo y pensaba que era un creído pero era tímido. Hace dos años nos reencontramos y es mi guardaespaldas, mi Kevin Costner (63). Me da miedo ir sola por la calle y él me protege. Me deja hablar con todo el mundo pero siempre me vigila.
Nuria se encuentra en una dulce fase de su vida, no solo en lo personal, donde ha encontrado al que ella llama su gran amor sino también en lo profesional. Trabaja en Televisión Esplugues, hace radio, es youtuber y además tiene dos canciones Olé y Eo. Fresita elevada a la máxima potencia.