Desirée Rodríguez (32 años), una de las concursantes más polémicas de la historia de Gran Hermano, se encuentra en paradero desconocido y sin dar señales de vida desde el pasado día 16 de agosto. Según ha podido confirmar JALEOS en primicia a través del círculo más íntimo de la sevillana, "no sabemos nada de ella. La estamos llamando y tiene el teléfono apagado. Tampoco le llegan los mensajes de WhatsApp".

Este periódico ha podido hablar con el productor Álvaro RPérez y la cantante Susana Villegas, dos de sus grandes amigos, que no dan crédito ante la situación de impotencia con la que están lidiando por no poder contactar con Desy. "Ella está en un pueblo cerca de Astorga, se llama Vega de Vagaz. Vive y trabaja en temas de limpieza en casa de una pareja que tiene una agencia. A través de esta agencia ella incluso tenía algún que otro bolo por allí por León", afirma Susana.

"La última vez que hablé con ella fue el día 15. Y yo la sentí normal, como siempre, además ella estaba muy ilusionada con nuevos proyectos, va a participar en la serie que estamos preparando...", expresa Álvaro. Para paliar cualquier tipo de especulación, sus íntimos quieren subrayar que Desy no tenía malos hábitos: "Es una persona que nunca se ha drogado, nunca ha perdido los papeles cuando se ha tomado una copa, ella es sana".

La vida de Desirée Rodríguez dio un giro de 180 grados cuando ingresó en la décimo cuarta edición del reality de convivencia más famoso de la televisión. Desde entonces, su exposición pública la llevó a exhibir en los diferentes platós de televisión la mala relación que mantenía con su padre y sus hermanos. Precisamente su progenitor, Modesto Rodríguez, se enroló en otro concurso de la cadena (Campamento de verano) a raíz de su controversia paterno-filial con la propia Desiré.

Casado en segundas nupcias con una mujer de origen latinoamericano, Modesto fallecía el pasado 7 de agosto de 2017 dejando a Desiré "sola en Umbrete, teniendo que pagar luz, agua, gas y todo. Entonces ella decidió marcharse a Italia con un amigo suyo peluquero que montó un centro de belleza allí con su novio, y como ella se dedica a la peluquería y el maquillaje probó suerte pero volvió pronto", comenta Susana. La última publicación de Desiré Rodríguez a través de su cuenta de Facebook data del pasado jueves 16 de agosto. En ella comentaba: "Me estoy enamorando de nuevo y me da miedo...".

La desesperación de sus amigos por localizar a alguien cercano a Desiré se ha vuelto enfermiza y sus intentos, hasta ahora, están siendo en vano. "Estoy de los nervios, pero quiero decirte que si algo le ha pasado, Dios no lo quiera, no es por su nada de malos hábitos o ni por su estado de ánimo", concluye Susana.

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