La vida de Sergi Pedrero (31 años) ha dado un giro de 180 grados en las últimas semanas. Un ídolo con más de 300.000 seguidores en Instagram, casi 50.000 en Twitter y algo más de 400.000 suscriptores en The Tripletz, el canal de YouTube que erigió hace cuatro años junto a su amigo y socio Lucas Loren (25).
El catalán ha emitido un comunicado para informar de que abandona de forma indefinida las redes sociales, esto es, su principal fuente de ingresos, tras las gravísimas acusaciones por parte de algunos usuarios que lo señalan de haber utilizado su posición de influyente para, presuntamente, ligar con chicos de entre 15 y 17 años.
El informe rubricado por él mismo comienza con unas disculpas y continúa subrayando su inocencia respecto de las acusaciones que lo han llevado a tomar tan drástica decisión. "Quiero reiterar que nunca me he aprovechado o he actuado de forma perversa para ligar con nadie ni he usado mi relativa fama para ello y mucho menos de mala fe". Continúa expresando haber visto la peor cara de las redes sociales, aquellas en las que quienes ayer lo alabaron, hoy lo condenan. "Esta situación", explica, "me está afectando hasta tal punto que provoca daños en mi salud".
Situado en la posición de víctima, Pedrero habla de "linchamiento público" y toma la decisión más importante de su vida: abandonar las redes sociales y eliminar temporalmente todo rastro de sí mismo. Para ello, ya ha inhabilitado la cuenta de Instagram que tantos ingresos le reportaba y ha eliminado todos y cada uno de los tuits publicados desde mayo de 2009, momento en que se unió a la red social del pájaro azul.
Sergi Pedrero comenzó su andadura en el mundo influencer junto a su gran amiga -Aída Domènech -Dulceida- (28) de quien llegó a ser su representante. El joven, a la sombra de la poderosa chica de moda, observó que su relevancia estaba siendo tal que tomó un camino paralelo y construyó su propio 'micromundo' junto a su socio, Lucas Loren. El silencio de la que fuera su representada respecto a esta controversia no está haciendo más que avivar el fuego de una situación que ha acabado con el retiro mediático e indefinido del DJ.
De su influencia en redes, Pedrero había hecho su modus vivendi. Las marcas deseaban que sus productos fueron expuestos a través de sus herramientas online, los festivales más divertidos del país querían su presencia como DJ y sus fans se cuentan por miles dentro y fuera del 'ciber' universo milenial.
Sin embargo, su sueño se ha visto truncado por el movimiento #SergiPedreroIsOverParty, hashtag en el que algunas de sus presuntas 'víctimas' han posteado mensajes en los que Pedrero supuestamente les habría instado a quedar siendo estos aún menores de edad.
A este aluvión de mensajes en su contra, se suma la presunta filtración de nudes (fotos de él mismo desnudo) que habrían corrido como la pólvora por las carpetas privadas de estos supuestos menores con los que Pedrero habría contactado. Hasta la fecha, no hay ninguna demanda judicial ni investigación abierta sobre el caso más allá de la determinación del empresario, que ha echado el cierre de forma indefinida a todos los canales en los que se posicionaba como uno de los jóvenes influyentes, prometedores y más punteros de la red.