Elizabeth Díaz (24 años), más conocida por su nombre artístico Jade Presley, es una joven promesa del mundo del porno descubierta por el afamado director y productor, Ramiro Lapiedra.
Es una joven extrovertida, de voz simpática que no tiene reparos en relatar su vida, tanto lo bueno como lo malo. Originaria de Tegucigalpa (Honduras), vino muy pequeña a España de mano de su padre y se crió en un pequeño pueblo de Tarragona: Amposta.
Su vida no ha sido fácil: estuvo en un centro de menores, es madre joven, ha tenido diversos trabajos para conseguir ganarse la vida como el campo... Elecciones que al final la llevaron a convertirse en Jade Presley. Jade porque era el nombre sus padres le querían poner de pequeña, y Presley porque Apolonia (otro descubrimiento de Ramiro y buena amiga suya) asegura que se parece a Isabel Preysler (67) de joven, apellido que terminó modificando en varios caracteres.
¿Cómo se interesó por el mundo del porno?
Entrar en este mundo lo pensé, la verdad, cuando era muy, muy pobre con 13 años. Veía mucho porno y entonces me gustaba, pero tardé cuatro años en decidirlo.
¿Con qué edad decidió que quería trabajar en este sector?
Con 18... pero terminé de dar el salto en 2016.
¿Cómo entro en este mundo?
Conocí a Ramiro Lapiedra a través de Facebook, dio la casualidad de que teníamos algún amigo en común, y era un tema que siempre había pensado y nunca descartado... Se puso él en contacto conmigo, y estuvimos dos años hablando hasta que finalmente me decidí. Un tiempo en el que creamos un vínculo y una amistad, primero con él y luego con Apolonia.
Un día me levanté y dije: "Creo que es el momento". Acababa de romper una relación que mantenía desde hacía años, un día cogí el teléfono, llamé a Ramiro y le dije: "Vamos allá". Subí a Barcelona donde estuve una semana organizándolo todo, haciendo fotografías, asistiendo a grabaciones de Apolonia...
Una buena forma de conocer el ambiente.
Yo ya había estado en alguna escena, en algún corto, en alguna fiesta liberal... No era mucha sorpresa. Simplemente iba para adaptarme, ver cómo funcionaba el tema de directores, cámaras y demás. A las dos semanas tenía una larga agenda con muchas escenas, y recuerdo que mi primer mes tenía tanto trabajo que Ramiro tuvo que cancelar dos o tres escenas porque no podía más.
¿Cómo fue la experiencia de grabar esa primera escena?
Fue divertido, porque fue una escena más del tipo reality. Una escena en la que me encontraba por la calle, de La Rambla a Plaza Catalunya, y que después aparecía Ramiro, Apolonia, incluso hasta una amiga mía participó. Fue muy divertida, aunque al principio tuviera muchos nervios. Hubo un momento en el que sentía tanta satisfacción que me dejé llevar y salió la pequeña Jade.
¿Cuál cree que es su punto fuerte para ser actriz porno?
Ser yo misma, enfocarte y pensar en ti, transmitir al público lo que realmente sientes y tratar de empatizar con tu público.
¿Ser fiel a usted misma también le está ayudando en su carrera?
Por supuesto, fuera y dentro de cámara. Te ayuda a creer tanto en ti... En mi caso yo me amo a mi misma, siempre pienso en mi y considero que lo más importante en esa película soy yo.
Dejando de lado a Jade, ¿cómo es Elizabeth?
Elizabeth es una chica más normal, que le gusta mucho cocinar; es una madre joven que ha tenido que pasar por muchos trabajos en su vida, como el campo; también estuvo en un centro de menores... A lo largo de mi vida he tenido que cruzarme unas etapas y Elizabeth es una mujer muy fuerte y que nadie contra ella.
¿Cómo se lo tomaron sus padres cuando les contó a lo que se dedicaba?
Mi padre vive fuera de España, y se enteró porque vio un vídeo, y la reacción de él... ahora mismo no tengo relación. Mi madre biológica vive en Tarragona, me habla, pero tampoco hemos tenido un vínculo realmente estrecho. Realmente es lo que yo piense, lo que yo opine, y hasta dónde quiero llegar.
¿Cómo se lo toma la gente a la que le comenta a lo que se dedica?
Yo crecí en un pueblo pequeño de Tarragona, Amposta, donde estuve nueve años, y es más complicado. La gente habla, y cuando se enteraron de mi primera película muchísima gente me habló. Recuerdo que se me colpasó el teléfono, se me bloqueó y tuve que ir al día siguiente a la compañía a cambiarme de número.
El primer año fue brutal. Recibí mucho bullying, mucho acoso, gente que ni siquiera conocía ahora me hablaba y otros eran de repente mis amigos... Era una confusión de situaciones. Pero realmente soy fiel a mi misma.
Al principio me afectaba un poco más por el tema de mi hijo, de mi familia... pero después, con el tiempo que ha pasado, realmente solo pienso en mi. Me da igual, si hay un problema lo tienes tú.
Hubo un momento en el que dejó de trabajar, ¿a qué se debió?
Dejé de trabajar porque me enamoré, no lo dejé por él, sino porque decidí dedicarme más tema fotografía, productos derivados de la marihuana...
Ahora quiere volver, ¿tiene algún proyecto entre manos?
De momento se está haciendo mi página web, donde habrá muchos productos míos destinados a crear mi propia marca.
¿Productos de qué tipo?
De muchos tipos: ropa, juguetes... me gustaría hacer una fusión y lograr crear la marca Jade Presley.
Siguiendo esta marca, ¿cómo se ve en 10 años?
Me veo viendo cómo mi hijo va a la universidad, espero haber terminado mi carrera de Administración y Contabilidad, con mi posible marca hecha...
¿Dejará de estar delante de la cámara?
Delante de la cámara puede que siga, pero detrás de la cámara por qué no. Yo el primer año como actriz estuve con un actor que también es productor y era la leche. Grabábamos juntos, a veces me dejaba dirigir los cortos, vestir a las chicas, maquillarlas... Es un trabajo apasionante.
Usted como actriz porno, ¿cuántas horas o escenas puede aguantar?
Las que quieras.
¿Cómo se prepara físicamente?
Tienes unos cuidados básicos, siempre las manos impecables, cabello, cuerpo, partes íntimas... También tienes que llevar una dieta, entrenar.
¿Lleva la cuenta de con cuántas personas ha mantenido sexo?
La cuenta no, la perdí, pero más de 100.
¿Tiene alguna anécdota divertida trabajando como actriz porno?
Una vez estaba grabando una escena, y veo cómo el Pony (un actor) perseguía a Apolonia, ambos estaban desnudos, por la casa para tratar de darle con una chancla. Todo el mundo riendo, yo estaba tratando de concentrarme y dije: "¡Coño, así no puedo trabajar!".
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