Se anunciaba este miércoles a bombo y platillo: Feliciano López (36 años) y su pareja sentimental Sandra Gago (23) se convertirán en marido y mujer después de que el as de la raqueta le pidiera matrimonio apoyado en un anillo de oro blanco y diamantes. Así, el tenista ha decidido repetir la experiencia que estrenó con Alba Carrillo (32): pasar por el altar. Sin embargo, a JALEOS se ha trasladado una condición sine qua non que haría muy diferente este futuro enlace del que protagonizó el deportista con la que fue su primera mujer y con la que acabó en los tribunales tras el divorcio. 

Según la información que maneja este medio, Feli, como se lo conoce en la intimidad, contraería matrimonio con Sandra "en separación de bienes". Un extremo que, en su primera boda, no llevó a cabo, ya que se dio el 'sí, quiero' con Carrillo en la condición de régimen de gananciales. En esta ocasión, esta suerte de cláusula, se asegura a este medio, se habría tomado de mutuo acuerdo y, en el caso de Feliciano, apoyado por su entorno. 

Eso sí, se apostilla a este periódico que esta razón no obedecería, en ningún caso, a una desconfianza por parte de la familia del deportista hacia la futura esposa de López. Todo lo contrario, se aclara: "Están encantados y creen que este va a ser su matrimonio definitivo". De hecho, el entorno de Feli no oculta que nunca "lo habían visto tan ilusionado como ahora". Mientras que para Sandra este será su primer matrimonio, Feliciano repetirá suerte después del fracaso de su boda con Alba Carrillo. Fue el 17 de julio del 2015 cuando el tenista y la exmujer de Fonsi Nieto (40) se casaron en una romántica ceremonia celebrada en Toledo, tierra de él. Un matrimonio que hizo aguas a los ocho meses y les llevó a enfrentarse en los juzgados en varias ocasiones. Precisamente, Carrillo escogió la misma publicación que este miércoles narra la gran noticia para anunciar su separación de Feliciano, quien, según contaba, "la dejó de forma fría y distante". 

Pero solucionados ya sus problemas legales con la modelo, López es un hombre libre para casarse de nuevo, algo que hará próximamente, aunque por el momento se desconoce la fecha concreta para ese ansiado 'sí, quiero'. Pero la ilusión por ambas partes es real y, de hecho, la pareja aprovechó el día de Reyes para anunciar que estaban comprometidos a todos sus familiares y amigos.

Aunque al principio de su relación les costó dar el paso de acudir de mostrarse en juntos en público, con el paso de los meses Sandra se ha convertido en una habitual en las gradas de cada uno de los partidos de Feliciano López. La joven modelo ha encajado a la perfección en el círculo social y familiar del deportista, llegando a ser la fan número uno del tenista. Pese al gran momento por el que está atravesando la pareja, lo cierto es que no todo han sido rosas en su camino hacia el altar. Desde que comenzaron la relación la sombra de Carrillo ha sobrevolado a la feliz pareja, lanzando comentarios y advertencias a la novia a través de varios medios: "Cuando vengas llorando, te abrazaré" o "la novia de Feliciano me da pena", son algunos de los comentarios que ha dejado caer la maniquí. 

Feliciano: "Sigo creyendo en el amor"

Feliciano ha recuperado la tranquilidad y la ilusión con la modelo Sandra Gago. Fue en una entrevista concedida a finales de 2017 a la publicación Vanity Fair cuando Feliciano López reconocía que todavía sigue creyendo en el amor: "Lo he visto en mi casa. A veces le digo a mi madre: 'No sé cómo has aguantado a papá tantos años'. Pero de eso se trata, de luchar por un bien común. Cuando los veo, vuelvo a creer en el amor y el matrimonio. En la vida hay que ser paciente. Los tenistas somos testarudos y constantes, no tiro la toalla".

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