En la casa de Gran Hermano DÚO ya no se puede respirar aire puro, límpido, sin contaminar. Ahí dentro, entre esos muros, está todo muy viciado; todos se miran con recelo y, me atrevo a decirlo, están perdiendo la cabeza. Lo que la semana pasada era A, hoy es B. Y esa transición sucede tan rápido que hasta uno se plantea si está perdiendo la cabeza también. ¿Que no me creen? Ahí tienen a María Jesús Ruiz (35), la otrora mala malísima, el demonio hecho carne, y hoy encarnada en Santa Teresa de Jesús. Ahora todos apoyan a la exmiss o le riegan los oídos -en su primera semana sin estar nominada- y cargan sin piedad contra Antonio Tejado (32) -en su primera semana como nominado-. Se pueden hacer una idea de la sinceridad que se practica allí.
Casi la misma que lleva a gala Kiko Rivera (35), el cual ha sido capaz de vender a su mujer Irene Rosales por encima de esa especie de hermandad enfermiza que se respira en Andalucía, esos motes huecos que vienen a no decir nada, pero que expresan lazos afectivos y sanguíneos bestiales. Yo soy andaluz, ojo, pero confieso que me pone nerviosito esos "compadre", "hermano", "ese es mi familia", "mi primo" que se sueltan Kiko y Tejado. Y cuidado, que esa amistad pasa por arramblar contra tu propia mujer, la madre de tus hijas. La persona con la que compartes tu vida. ¿Ven? Locuelos todos. Este domingo he aplaudido el discurso de Irene Rosales, quien no empieza a ver con buenos ojos a Antonio y su supuesta lealtad hacia su marido. "Creo que si tiene que elegir o salvar a alguien, salva antes a Alejandro Albalá que a Kiko. Para esas cosas Kiko es gilipollas y se deja llevar por el pasado y el cariño", le ha secreteado Rosales a su amiga Carolina Sobe.
Total, que no se fía de Tejado ni de Alejandro Albalá. En su opinión, ambos son unos falsos con Kiko. Irene cree que su Kiko no es consciente de que el sobrino de María del Monte (56) le va a dar la puñalada más pronto que tarde y no sabe cómo hacérselo ver. Que no debería, ya que hace unas semanas que están concursando por separado y no en pareja -cada uno mira por su pellejo-, pero el amor le tira. Sin embargo, parece que este no surte el mismo efecto en el hijo de Isabel Pantoja (62), ya que no ha dudado en vender a su mujer con Tejado cuando este le ha preguntado si creía que ella le había votado para echarlo este jueves: "Ni lo dudes, seguro". ¿Perdona? ¿Se puede traicionar a alguien de una forma más fea? Y lo que es peor, serle desleal más que infiel: "Ella está concursando y va a por todas" ¿Y tú? ¿Que, estás de vacaciones? ¡Terrible!
Lo que está claro es que Irene y Kiko están cada día más separados por culpa de Tejado; la una lo quiere fuera, y el otro lo apoya a pies juntillas. Es evidente que se respira crisis en el paraíso del matrimonio, el cual, para colmo, este domingo ha tenido una de sus peleas más fuertes en GH DÚO. Resulta que para la prueba de esta semana los concursantes tenían que tener controlados dos enorme relojes, uno con la hora de Canarias y el otro con la de la Península. Así las cosas, debían mover las manillas de los mismos de forma manual y, para eso, debían turnarse casi milimétricamente para no descuajaringar las horas. La disputa ha venido cuando Irene le ha reprochado a Kiko que ella había hecho "seis horas" y este no opinaba lo mismo: "Has hecho dos, no seis".
La pelea ha llegado a tales límites que el propio Kiko ha descargado su ira contra su mujer. En público y a gritos: "A partir de ahora te va a dar conversación un guardia", "Se me quitan las ganas de estar a tu lado", "Siempre estás reprochando, no con la boca, pero sí con los gestos". El reproche ha alcanzado el nivel máximo cuando Rosales ha visto que Kiko se ponía al lado de Tejado en uno de los enfados colectivos más grandes de la casa de Guadalix: "Está ciego y no se da cuenta de nada". Todo ha desembocado cuando Antonio se pegó una gran juerga por la noche, en solitario, bailando y bebiendo en homenaje a Ylenia Padilla. El tío, después de mover las caderas y cantar lo más grande -qué pesado eres-, durmió la mona y no se despertó a su hora para mover las manillas del reloj.
Bien entrada la mañana, toda la casa estaba en su contra llamándolo irresponsable e inmaduro. Este, con la sábana pegada en la cara, se escuda en que Juan Miguel le había dicho que le hacía el turno, y que durmiera plácidamente. Vale, venga, sí, vamos a dar por válido que ha pasado así, pero, ¿dónde queda su palabra y tu sentido de la responsabilidad? Lo siento mucho pero estoy totalmente con María Jesús, la cual ha dado en el clavo sobre tu personalidad: "Es una persona que lo ha tenido todo en su vida y no sabe lo que es la responsabilidad y trabajar". No te ha podido retratar mejor. Como decía, hasta en ese caso tan grave -han perdido la prueba por su culpa y, por tanto, no podrán hacer la compra semanal- Kiko le ha echado un capote. Claro, es que resulta que -shhhhh- Kiko compartió copichuelas con él esa noche. Entre bomberos no se pisan la manguera, dicen.
El dramón de Carolina Sobe
Voy a ser muy claro: cada día que pasa tolero menos a Carolina Sobe. La veo una trepa de mucho cuidado, una lianta de un par de narices y una mujer que se traía muy bien estudiado su papel: no montar gresca siempre y cuando no esté nominada. Y cuando lo está, tira de un drama que no hay quien se lo crea. Tía, eres chismosa y tienes muchos gatitos en la barriga. Yo no te compro. Resulta que esta semana se ha sentido muy sola con la expulsión de Ylenia y en el confesionario ha llorado como una magdalena. Y tirando a dar en lo sensiblero: la mujer.
Sus argumentos eran que, jolín, nunca podría nominar ni a María Jesús ni a Irene porque son madres que necesitan el dinero y que se han sacrificado separándose de ellos para concursar. Hija, tampoco nos volvamos locos que no están ninguna de las dos en la mina o fregando escaleras a 8 euros la hora. A ver si utilizamos discursos más elevados, que el público no es tonto. Pese a que me caes mal, ¡quiero que se vaya Juan Miguel! No hace nada, no se mete en ninguna trama, es un bulto en la casa al que lo más heroico que le ha pasado es que se la ha caído un diente. ¡A casita! Ah, como ven, ni contemplo la ida de Tejado: es el alma del concurso, para lo bueno y para lo malo.
Nominados: Antonio Tejado, Carolina Sobe y Juan Miguel
Porcentajes: 2,6 / 34,1 / 63,3
[Más información: La escena sexual de Antonio Tejado e Ylenia censurada en GH DÚO]