El fotógrafo Gustavo González (53 años) sigue encontrándose en una posición delicada tras haber salido a la luz las presuntas traiciones que perpetró a su íntima amiga Gema López (47). Según desveló María Lapiedra (34), expareja del fotógrafo, en una entrevista reciente, Gustavo filtró a la prensa no solo la noticia del divorcio de Gema López sino que la periodista estaba viviendo un supuesto romance furtivo con un compañero de Telecinco. 

Ahora Gustavo ha hablado. No solo lo hizo en el plató de Sálvame este lunes sino también en sus redes sociales. El paparazzo ha tomado las riendas de su cuenta de Twitter para enviar un mensaje a quien ha sido su compañera y amiga durante más de quince años: "A veces hay que desdoblarse o multiplicarse para mantener compostura, equilibrio y prudencia. Tarde difícil en Sálvame. Sentimientos encontrados por el daño provocado a una compañera y excelente persona que merece el respeto dignidad, honradez y profesionalidad que se ganó", ha publicado. 

Sin aludir directamente a Gema López, Gustavo ha entonado el mea culpa asumiendo que ha provocado dolor sobre su compañera de profesión con quien comparte plató y experiencias desde hace más de una década. Por su parte, López, cuya vida personal es totalmente hermética, se ha convertido de forma involuntaria en protagonista de una nueva polémica en el programa vespertino de Telecinco. 

Con Gema y Gustavo por fin en plató y cara a cara, el caos se desató en directo. Los colaboradores del reportero gráfico no lograban entender cómo podía haber traicionado de esta manera a una amiga como Gema López, una persona "que siempre ha estado ahí cuando Gustavo lo ha necesitado", afirmaban. Mila Ximénez (65) fue otra de las que cargó duramente contra él: "Lo vendisteis como una noticia real, no como un rumor. Lo vendisteis tan bien que incluso me lo creí, disteis datos, nombres sitios incluso provocasteis un seguimiento".

Una discusión a la que se sumó también Belén Esteban (45): "No te tienes respeto ni a ti mismo". Tras un fin de semana complicado, la protagonista de esta pugna volvía al trabajo este lunes sin ganas de hablar con quien fuera su gran amigo.

La periodista aseguraba que ya no buscaba el perdón del fotógrafo pues este había traicionado su confianza gravemente: "Creo que me he ganado el respeto, otros lo han perdido y a mí no me hacen falta explicaciones ni que se pongan de rodillas ni que me pidan perdones. Ha habido tiempo suficiente, no has dado la cara y ahora es demasiado tarde, princesa, como diría Sabina".

Sin querer entrar en guerras con María Lapiedra, Gema López ha querido zanjar la polémica para que no se hable más de su vida privada, un terreno que siempre ha preferido mantener alejado de la televisión.

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