Están siendo unas fechas muy especiales para la modelo Judit Mascó (49) y su marido Eduardo Vicente. Hace unos días, su tercera hija, Romitha (18), cumplió la mayoría de edad y el matrimonio le preparó una emotiva cena de la que ha dado cuenta Judit en su Instagram. En la imagen aparece la joven muy sonriente junto a una tarta y el número dieciocho iluminado con unas velas. "Mano a mano sólo con ella. Una cena de lujo para la ocasión", posteaba la presentadora, orgullosa de su hija, a la que adoptaron en febrero de 2003.
Horas antes de esa estampa de familia feliz, Mascó había publicado otra instantánea en la que aparece a punto de besarse con su hija bajo el mensaje "18 primaveras, te quiero mucho, hija". Lo cierto es que la top no acostumbra a subir imágenes en su red social junto a sus hijas, pero en esta ocasión ha querido hacer una excepción. La modelo y el abogado se casaron en 1993 con la firme idea de formar una gran familia, y, con los años, no cabe duda de que han conseguido su objetivo.
Así, Romitha es la tercera hija del matrimonio. La presentadora de Supermodelo la adoptó hace 17 años en Haití, el país de origen de la adolescente. Cuando Judit y Eduardo incorporaron a la bebé a su familia, el matrimonio ya contaba con dos hijas. Entonces Romi -como se la conoce cariñosamente en su intimidad-, con solo 18 meses, pasó a ser la pequeña de la familia.
Judit ha confesado en más de una ocasión sus deseos de alumbrar a una familia numerosa y de adoptar como vía para conseguirlo. Cuando Romitha llegó a sus vidas, la modelo se sinceró: "Aunque la adaptación es difícil, porque la niña viene de un orfanato, y tiene una falta de cariño y de estímulos enorme, rodeada de otros niños todo está siendo mucho más fácil". Es más, en esos ilusionantes días la top expresó lo que sigue: "Eduardo y yo siempre tuvimos claro que algún día adoptaríamos, pero después de tener hijos biológicos. Estamos muy contentos de que sea otra niña. Duerme en la misma habitación que sus hermanas, aprovecha su ropa y puede jugar con ellas".
Antes de su llegada a España, la maniquí y el abogado contaban con dos hijas. La mayor de ellas es María, nacida en 1998; le sigue de cerca Paula, nacida en 2000; después, Romitha, a la que adoptaron en 2003, y, por último, Clara, que está a punto de cumplir 13 años. Aunque en la medida de lo posible ha procurado esquivar la exposición de sus hijas, Mascó ha hablado en alguna ocasión de sus intenciones profesionales: "Cuando eres madre, lo único que quieres es que sean felices. Ellas, por ahora, no han mostrado interés en ser modelos. Lo único que me gustaría es que, lo que decidan hacer, lo puedan hacer y que eso les haga felices, que es lo que yo hice". Fue a principios de año cuando Judit posó por primera vez junto a sus tres hijas mayores sobre la alfombra roja de los Premios Gaudí.
El matrimonio de Judit y Eduardo es uno de los más sólidos del panorama nacional después de que hace unos meses celebraran sus bodas de plata. #ElAmorSeConstruyeDíaADía fue el hashtag que utilizó Judit Mascó para tan importante momento. "Hoy 25 años de casados", decía junto a muchos emojis de amor. "Después de un fin de semana de paz y tranquilidad, hemos valorado estos años juntos y hemos aprobado con nota. Seguiremos caminando juntos con complicidad y buena energía positiva. Gracias por vuestro cariño", agradecía en su Instagram.
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