Isabel Pantoja (62 años) está a punto de abandonar su 'Cantora del alma', para embarcarse en Supervivientes, que dará comienzo el próximo jueves 25 de abril. Antes de dejar España, ha concedido una exclusiva entrevista -la última antes de su aventura hondureña-, en la que cuenta las razones sobre su participación en el concurso entre las que en ningún momento destaca las necesidades económicas como una de ellas. Pero la realidad es que tanto su caché en la isla como el valor de su reciente posado -según ha podido saber JALEOS- se traduce en cifras a las que únicamente un reducido grupo de personajes puede acceder.
Los altos ingresos que obtendrá la tonadillera durante los próximos meses no han hecho más que empezar. Los últimos y más recientes son los recibidos por la revista ¡HOLA!. Y es que tal y como ha podido saber JALEOS por fuentes expertas en el sector, Pantoja se habría embolsado más de 100.000 euros por la entrevista y el posado, que completan el amplio reportaje de 12 páginas. Además, cabe destacar que esta cifra es íntegra para la futura concursante de Supervivientes, ya que ha sido su hermano, Agustín Pantoja, el encargado de gestionarlo directamente con la publicación. La revista en cuestión, con la que se ha puesto en contacto este medio, únicamente ha querido afirmar que "nunca se revelan cantidades" que acuerdan con sus personajes.
Esta entrevista no forma parte del contrato 'en pack' que la tonadillera firmó el pasado martes con Mediaset, en el que se incluye su caché de 80.000 euros en Supervivientes -más medio millón extra independientemente de lo que sucediera en el concurso-, y otros servicios, como una serie sobre su vida o un programa musical. Todo ello tendría lugar después de finalizar el reality de Telecinco.
La cantante está a un paso de embarcarse en la experiencia más extrema de su vida pública. Antes de poner rumbo a los Cayos Cochinos, Pantoja ha hablado de sus miedos, de su controvertida decisión, de su futuro encima de los escenarios y de sus primeras sensaciones ante la posibilidad de permanecer tres meses en una isla incomunicada, sin comida y sin recursos básicos.
En su faceta más personal, Isabel Pantoja se conforma con que en España todo permanezca tal y como ella lo deja. Con carácter de matriarca, Maribel, como la llaman sus amigos, tiene la preocupación de dejar en Cantora a su madre, doña Ana Martín, quien ya supera los 88 años y está delicada de salud. Además, uno de los requisitos que ha puesto incluiría el poder regresar en cualquier momento a España, sin penalización alguna, si su progenitora empeorase.
En cuanto a sus condiciones físicas, algo fundamental para superar con buena nota cada semana en la isla, se puede apreciar una notable pérdida de peso en Isabel, que no ha dudado en asegurar que tiene que recuperar algunos kilos: "Estoy muy delgada y me han dicho que debería engordar como cuatro o cinco kilos antes de irme. Sé que no podré fumar, pero no me preocupa. ¡Ojalá consiga dejarlo!", desliza Isabel Pantoja mientras posa al más puro estilo salvaje.
"Nunca he pasado hambre, aunque también es cierto que como muy poco. No soy muy comilona", afirma la cantante, cuyo mayor miedo no es el hambre ni el hecho de tirarse del helicóptero: "No me preocupa, ¿no ves que hay una gran seguridad?". Más allá de las penurias que Isabel pudiera pasar en la avión, el previo es lo que más le aterra. "Me asusta el avión [...] Me ha dado miedo toda la vida", expresa. ¿Bikini o bañador? Es la pregunta que más de uno se ha hecho respecto al fichaje de Pantoja. En sus propias palabras: "No me voy a poner bikini porque yo siempre he llevado traje de baño, y como estoy acostumbrada a verme sin pintar, voy a estar con coleta o con mi trenza. Lo que me pone mala es no poder tener mis gafas de sol", un accesorio del que no se separa nunca.
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