Cristiano Ronaldo (34 años) y Georgina Rodríguez (25) han aprovechado las vacaciones de Semana Santa (y algunos días de la siguiente semana) para hacer una escapada a Dubrovnik (Croacia). Un viaje romántico, relajado y al alcance de pocos bolsillos.
La pareja ha disfrutado de una villa privada de lujo, de los restaurantes mejor valorados de la zona y de transportes exclusivos que han costado, uno tras otro, varios miles de euros al futbolista. JALEOS hace un desglose de la factura de Cristiano y Georgina en estos días de vacaciones que suma, como mínimo, 20.000 euros en tres días.
Una villa de lujo
El mayor gasto de su viaje a Dubrovnik ha sido el alojamiento: una exclusiva villa de lujo, llamada Sherezade. Se trata de un lujoso palacio abovedado de piedra blanca con vistas al mar que tiene un precio de 7.000 euros la noche.
La elección no suena extraña viniendo del futbolista y la modelo, acostumbrados a una vida de lujo y comodidades al alcance de pocos. Hace solo unos meses alquilaron dos mansiones en La Zagaleta (una de las zonas más exclusivas de toda España), a 7.000 euros la noche.
La villa Sherezade es perfecta para un viaje romántica. La historia cuenta que fue construida en los años 20 por un empresario lituano que huía de la Revolución de Octubre a su amante que llamaba Sheherezade.
En total son 4.200 metros cuadrados de techos altos, materiales de primera calidad y muebles hechos a medida. Este espacio se distribuye en tres plantas festoneadas entre los que se incluyen cinco habitaciones de invitados con baños privados, un salón grande, una sala de banquetes, un estudio y una cocina, entre otros.
Pero si uno viaja para hospedarse en las orillas de Dubrovnik no lo hace para quedarse dentro de un edificio, por muy majestuoso y elegante que sea. La villa Sherezade también ofrece a Cristiano y a Georgina la posibilidad de disfrutar de las maravillas del mar Adriático alejados de las miradas indiscretas y de los objetivos de posibles paparazzis.
¿La razón? El palacio está ubicado en un acantilado tranquilo, con multitud de terrazas de piedra blanca en las que se encuentra el muelle privado, la playa particular, una piscina a orillas del mar y amplias zonas ajardinadas.
Los mejores restaurantes
Las ocasiones que abandonan este exclusivo palacio, la pareja lo hace con un motivo de peso: los mejores restaurantes de la ciudad, en los que han degustado manjares de todo tipo.
Uno de los que más destacó fue el restaurante Dubrovnik en Lopud especializado en la comida mediterránea con productos frescos. Este local es uno de los más conocidos de Lopud (una isla frente a Dubrovnik) por su cocina y por sus vistas, ya que la terraza está a escasos metros del mar.
Sin embargo, su precio difiere mucho del de otros restaurantes de la misma calidad (sin tener en cuenta las vistas). Muchos de su platos no superan los 30 euros, por lo que resultaría una comida bastante económica para la pareja.
Un local económico (para Cristiano), con comida de calidad y buenas vistas con el que disfrutaron tanto que incluso el deportista se prestó para fotografiarse con el personal del local. Dejando constancia, de paso, de la gran sonrisa que inundaba su rostro.
Posteriormente, la pareja continuó con su turismo gastronómico en otro de los mejores locales de la zona: el restaurante 360, cuyas terrazas se extienden a lo largo de la muralla medieval que rodea la ciudad de Dubrovnik.
El interior del restaurante también llama la atención, ya que el comedor está decorado con una combinación de paredes de piedras históricas junto a piezas de diseño y tiene vistas a la cocina acristalada.
Con una estrella Michelin, este local ofrece a sus clientes una cocina vanguardista que fusiona la gastronomía típica de la zona con los últimos avances en cocina. Eso sí, a un precio muy diferente al bar de la isla Lopud, ya que su menú degustación está valorado en 120 euros por persona.
Desplazamientos, exclusivos
Por seguridad y discreción, cada vez que Cristiano Ronaldo y Georgina se desplazan (ya sea a un local cercano como a otro país) lo hacen en sus propios vehículos y con todos los lujos posibles.
Así, para volar a Dubrovnik utilizaron el avión privado del futbolista. Se trata de un modelo Gulfstream G200 valorado en 19 millones de euros que compró en 2015 y con el que, además, fundó su propia empresa aeronáutica: Dutton Invest.
El hecho de que el avión sea de su propiedad no le exime de tener que pagar una serie de gastos asociados a este tipo de viajes. Como media, por los gastos que supone el combustible y el gasto en personal, una hora de viaje en un avión privado tiene un coste medio de 1.900 euros.
A esto hay que sumar los transportes una vez en Dubrovnik. Para desplazarse por la ciudad la pareja ha alquilado un servicio de transporte privado, con un chófer que los desplaza en una furgoneta negra con los cristales tintados.
También recurrieron a un servicio privado para desplazarse a Lopud, seguramente una lancha que los recogiera en su propio muelle privado y que los llevara directamente hasta la isla.
Gastos varios, al alcance de pocos, pero que son norma habitual en la vida de Cristiano y Georgina, acostumbrados a este tipo de lujos.
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