Avalancha de críticas a Carlos Sobera tras ser nombrado como pregonero del Orgullo

Carlos Sobera (59 años) será pregonero del Madrid Orgullo 2020, que este año se celebrará de forma virtual por las restricciones sanitarias del coronavirus. El presentador acompañará a las actrices de la serie Veneno, el waterpolista Víctor Gutiérrez (29) y la actriz Itziar Castro (43) para dar el pistoletazo de salida a los eventos.

La organización del evento ha decidido contar con el presentador porque forma parte de "uno de los programas de televisión que más visibiliza la diversidad", comentan en el Twitter oficial del Orgullo de Madrid.

Pero la elección de Sobera no ha sido lo bien recibida que se esperaba y ha levantado ampollas en el colectivo, pues consideran insuficiente su labor al frente de First Dates como motivo para que él, de orientación heterosexual, ejerza como pregonero. Por ello, las redes han vertido duras críticas tanto hacia el presentador como a la organización del evento.

Los internautas críticos con la decisión de la organización apuntan que en el pregón se debe dar voz a gente perteneciente al colectivo y comprometida con la lucha por la igualdad, como es el caso de las protagonistas de Veneno, todas mujeres transgénero.

Esta no es la primera vez que las redes claman contra Carlos Sobera, pues el presentador ha sido acusado de fomentar la ludopatía por prestar su imagen para anunciar casas de apuestas. Un hecho que las voces críticas han vuelto a recordar tras conocerse que será pregonero del Orgullo.

La polémica por el pregón del Orgullo LGTBI no es nueva. En el año 2016, más de 10.000 personas en 24 horas firmaron una petición contra la presentadora Eva González (39) y los miembros del jurado de Masterchef, Jordi Cruz (41), Pepe Rodríguez (52) y Samantha Vallejo-Nágera (50), alegando su "falta de sensibilización con el colectivo" después de que fueran anunciados como pregoneros. Aquella controversia provocó que la organización diera marcha atrás, dejando el Orgullo de Madrid sin pregón por primera vez en una década. 

Detrás de ambos casos se encuentra la Asociación de Empresarios para Gays y Lesbianas de Madrid (AEGAL), una de las entidades organizadoras de los distintos eventos que cada año conmemoran los disturbios de Stonewall de 1969. 

Son muchas las organizaciones y colectivos que acusan a AEGAL de lucrarse con el Orgullo y de restar protagonismo al activismo cediendo su espacio a personajes famosos cuyo compromiso con la causa LGTBI es más que cuestionable.

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