Esther Doña (42 años) ha reaparecido este jueves 25 de junio y lo ha hecho para asistir al velatorio de Manolo Segura, padre biológico de Borja Thyssen (39), cuyos restos mortales descansan en el tanatorio de Tres Cantos de Madrid. La viuda del marqués de Griñón se ha desplazado hasta esta localidad situada al norte de la capital española para dar el último adiós a su amigo.
Desde que el pasado 20 de marzo Carlos Falcó falleciera a causa del Covid-19, su viuda se había mantenido alejada de todo y de todos. Esta es la primera vez que Esther Doña se deja ver tras la triste muerte de su esposo.
Ha llegado al tanatorio con el rostro muy serio, escondiendo sus mirada bajo unas grandes gafas de sol y con mascarilla como manda el protocolo de seguridad ante la actual pandemia. Ni a la entrada ni a la salida del tanatorio ha querido hacer declaraciones y ha mantenido un sepulcral silencio ante las preguntas de los medios que hacían guardia a las puertas.
En el interior se ha reencontrado con Paz Pastor, exmujer de Manolo Segura, con la que estuvo casado 15 años; y con otros conocidos como Juan Palacios, el dueño de Viceroy, quien ha asegurado ante las cámaras tener "el corazón roto" por la triste pérdida del que fue su amigo durante más de 45 años. "Nos hemos enterado a las 5 de la mañana y bueno, una enfermedad que se nos lo ha llevado. Lo sentimos muchísimo, estamos un poco emocionados", ha afirmado.
Abandona El Rincón
Han pasado tres meses desde que Esther Doña perdiera a uno de los hombres más importantes de su vida y desde entonces hasta hace unas semanas ha permanecido recluida en el palacio El Rincón. Es la propiedad que el aristócrata tenía en Aldea del Fresno, donde vívía con su mujer hasta su muerte, y que ahora ha pasado a manos de uno de sus herederos. Se trata de una impresionante fortaleza ajardinada del siglo XIX que es la joya de la corona inmobiliaria de los Falcó.
Tras la salida por sorpresa al mercado de esta propiedad, Esther Doña ha abandonado el que hasta ahora era su hogar. Una decisión que habría tomado por ella misma y que la habría llevado a instalarse de nuevo en el piso del que ella es propietaria en Majadahonda.
Fue en septiembre del año 2015 cuando Carlos Falcó conoció a Esther. Tras tres años de convivencia, decidieron casarse en secreto en julio de 2017 precisamente en El Rincón. Ni la diferencia de edad, ella 40 años más joven que él, ni la oposición de los hijos del marqués quebraron su intensa relación de amor. Solo la muerte ha logrado separarlos. Ahora Esther Doña vive con la única compañía de su querida mascota, su perrita Chloé.
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