La polémica originada entre Isabel Pantoja (64 años) y su hijo Kiko Rivera (36) está generando un sinfín de titulares y parece lejos de alcanzar un final feliz. El cantante ha dedicado todo tipo de reproches a su madre y ha desvelado que está estudiando la herencia de su padre, Paquirri, para saber si la tonadillera engañó a su hijo tras la muerte del torero.

En medio de esta trama familiar, y tras la incendiaria exclusiva de Kiko Rivera en Lecturas, el testimonio de las personas que han sido parte del entorno de los Pantoja cobra especial interés. Uno de esos personajes que ha estado en la vida de la artista durante varios años ha sido Julián Muñoz (72).

El exalcalde de Marbella, sin embargo, no ha querido hacer declaraciones sobre esta nueva polémica de su expareja y ha estallado contra el reportero que aguardaba a las puertas de su casa para preguntarle por el asunto.

Muñoz ha vuelto a mostrar su peor cara contra la prensa al exigir al periodista que se alejara de él de una forma poco amable: "¡Que ni te acerques, a diez metros de mí, soy un enfermo de riesgo, no te acerques!", se ha limitado a responder.

E insistía: "Ponte lejos, que soy un enfermo de riesgo. ¡Cuatro metros, cuatro metros de mí! ¡Fuera, fuera!". Cabe recordar que el expolítico, condenado en 2013 a 19 años de cárcel por distintos delitos de corrupción, logró la concesión del tercer grado penitenciario en mayo de 2016 debido a una "enfermedad grave con padecimientos incurables".

Problemas de salud

El ex alcalde de Marbella continúa cumpliendo condena en casa de su hija Eloísa en Nueva Andalucía. Pero Julián Muño sigue dándose sus paseos y sus salidas. Cada vez que le ponen un micrófono, él insiste en que "los médicos y forenses han dicho que mis enfermedades son graves e incurables y que mi pronóstico de vida es corto". Pero entre pastilla y pastilla, de las 16 cápsulas que él dice tomarse, da un respiro y disfruta la vida.

Por su aspecto puede apreciarse cómo mejora por minutos. El pasado mes de febrero, JALEOS lo encontraba en su último refugio. Un restaurante instalado en un complejo deportivo donde le gusta beberse sus cervecitas al sol y degustar los platos mas cool de local, como las hamburguesas de carne Wagyu con queso americano. Él no para de decir que tiene todas las arterias tocadas y lleva tres stents en la arteria coronaria y dos en las piernas, pero las dietas hipocalóricas no parecen importarle a la hora de seguir un régimen para este tipo de enfermedad.

Desde que el juez le permitió su libertad, a pesar de quedarle diez años para concluir su condena, el exalcalde ha cogido peso y muestra muy buen aspecto, tal y como demuestran las fotografías captadas por este medio. A sus setenta y dos años, dice encontrarse feliz y bromeando también asegura que sufre "pitopausia".

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