La batalla legal que mantienen Rocío Carrasco (43 años) y Antonio David Flores (45) se ha cobrado una nueva e inesperada víctima colateral. Y es que, según han desvelado en exclusiva en El programa de Ana Rosa, la hija de Rocío Jurado ha demandado a Belén Esteban (47), acusando a la colaboradora de revelación de secretos e intromisión al honor después de que la de San Blas contase, a comienzos de 2020, que la mujer de Fidel Albiac (47) tiene una deuda de 1.000.5000 euros con la Comunidad de Madrid por no haber pagado el impuesto de sucesiones.
Todo se remonta a cuando Antonio David se encontraba concursando en Gran Hermano Vip. La Comunidad de Madrid envió una carta al colaborador y, como éste estaba incomunicado en la casa de Guadalix de la Sierra, fue Olga Moreno (46) quien la abrió. En dicha carta, la Agencia Tributaria de la Comunidad de Madrid informaba al padre de Rocío Flores (24) de que, en el caso de tener que pagar alguna cantidad a Rocío Carrasco, no lo hiciese porque la hija de Rocío Jurado debía una cantidad superior al millón de euros por impago del impuesto de sucesiones tras el fallecimiento en 2006 de 'la más grande'.
Belén Esteban y su marido Miguel Marcos saliendo de un juzgado en 2017.
Olga puso esa carta en conocimiento de sus abogados y, además, esta información se conoció públicamente después de que Belén Esteban la desvelase en Sálvame en exclusiva, algo que a ambas le ha traído fatales consecuencias. Y es que Rocío Carrasco ha decidido acudir nuevamente a los tribunales y presentar sendas demandas penales contra la mujer de Antonio David y contra la ex de Jesulín de Ubrique (47) por vulneración del honor y la intimidad y por revelación de secretos, al haber hablado públicamente de sus deudas económicas con Hacienda.
El nexo de unión entre Antonio David y Belén Esteban es el representante de ambos, Agustín Etienne, exnovio de Arancha de Benito (51) que también lleva la carrera de la hija de Rocío Carrasco y el exguardiacivil, Rocío Flores.
Rocío Carrasco saliendo de un juzgado en Alcobendas en 2015.
Una demanda por lo penal en la que Rocío Carrasco pediría cárcel para ambas y por la que, próximamente, podría verse las caras con Belén en los tribunales. Algo impensable que no sabremos cómo habrá sentado a la colaboradora de Sálvame, en reposo por un esguince en la rodilla tras haberse caído en su domicilio el pasado fin de semana.
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