Alessandro Lequio (60 años) y Ana Obregón (65) siguen cumpliendo con el ritual mediante el que rinden una especie de homenaje silencioso a Álex Lequio desde su adiós el pasado 13 de mayo de 2020. Esta vez, los padres del fallecido empresario han coincido compartiendo prácticamente a la vez sus recuerdos.

Esta misma mañana de jueves, el italiano ha querido descubrir a sus seguidores un aspecto de la personalidad de su hijo, de la que todavía no había hablado. Con una imagen en blanco y negro del joven, posando divertido con cierto toque chulesco con una sudadera de "Duke" y una pelota de baloncesto en la mano, el colaborador de El programa de Ana Rosa ha desvelado dos de las pasiones de Álex, que no son otras que la que fue su universidad y el basket.

La prestigiosa Universidad de Duke, en Carolina del Norte (Estados Unidos) fue donde el hijo de Ana Obregón estudió, durante cuatro años, la doble licenciatura de Filosofía y Ciecias Políticas y, tras su regreso a España, siempre recordaba esta experiencia con muchísimo cariño y orgullo.

Además, lejos del ejemplo de otros "hijos de" que suelen aprovechar el poder de su apellido y protagonizar polémicas constantemente, Álex era un joven muy discreto que, además de emprender su propio negocio, siempre destacó por su amor por el deporte. Aficionado al fúbtol, al golf y a a los deportes acuáticos, ahora su padre desvela, casi 9 meses después de su fallecimiento, que su pasión no era otra que el baloncesto, como se puede ver en esta fotografía inédita con la que Lequio, recordando a su hijo, ha dado los buenos días.

Por su parte, Ana Obregón, compartía algunas horas antes que Alessandro una fotografía muy especial en sus Stories de Instagram. Se trata de una imagen antigua, de la infancia de Álex, en la que madre e hijo aparecen dándose un tierno beso mientras ella sostiene al pequeño en el aire.

"Besos eternos #alessforever", es lo único que ha querido redactar la actriz junto a esta bella instantánea que por sí sola ya lo dice todo.

Al mismo tiempo, García Obregón también publicaba en su perfil una fotografía en la que la única protagonista visual es ella, pero en la que su hijo está muy presente. Vestida totalmente de negro, con un vestido, botas altas y un abrigo ejecutivo, la actriz se muestra seria pero serena.

Junto a la imagen escribe un mensaje para Álex: "Mi Guerrero de Luz, si puedo ver las estrellas es que no estás tan lejos. #alessforever". Una vez más, Ana reivindica su necesidad de sentir a su hijo cerca y demuestra que pese a que jamás podrá olvidarle, está aprendiendo a encontrarle en los pequeños detalles y sentirse protegida por él esté donde esté.

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