Jorge Javier Vázquez (50 años) comienza este viernes su búsqueda del amor. Desde su trono rojo y dorado del programa de Cuatro Mujeres y Hombres y Viceversa, el presentador se muestra dispuesto a conocer a todos aquellos que quieran conquistarle -y que previamente han pasado un exhaustivo casting-. Por el momento se conocen solo los cuatro primeros pretendientes, sin embargo, pese a las buenas intenciones que todos ellos puedan tener, ninguno podrá ponerse jamás a la altura de su expareja, Paco.
"Somos como hermanos, es uno más de mi familia. No sé dentro de un tiempo cómo será, pero él es ya de mi familia. Es uno de los hombres de mi vida, pero tengo 50 años y cuantos más haya, mejor", explicaba en una de sus últimas entrevistas.
"P" -como cariñosamente le llamaba Jorge para mantenerle en un discreto plano mediático- y el presentador comenzaron a salir en pleno auge televisivo del catalán, allá por el año 2008. Enseguida percibieron una fuerte conexión entre ellos que se consolidaría con el paso del tiempo. Mantuvieron su relación en un perfil bajo, procurando estar siempre lo más lejos posible de los focos. De hecho, apenas existen un par de ocasiones inmortalizadas en las que se les puede ver juntos y enamorados, ambas estando de viaje en el extranjero.
Pero en enero de 2018 llegó el fin de la gran historia de amor que durante una década hizo tan feliz al presentador más valorado de Telecinco. En aquel momento vivía una intensa vida laboral. Estaba a cargo de la mayoría de las tardes de Sálvame, también estaba presente en el prime time nocturno de la cadena y ponía en marcha Grandes éxitos, su segunda obra de teatro de temática musical. Pues días antes del 15 de enero, instante clave para Jorge porque era la fecha de estreno de su gran apuesta sobre las tablas en el Teatro Rialto, el que fuera su novio durante diez años decidía acabar con todo y marcharse de casa.
Fueron días muy confusos para Vázquez y ante los continuos rumores y el goteo incesante de información en los medios, el de Badalona se pronunció en directo sobre su ruptura: "A mis compañeros y a los que me siguen por aquí sólo les puedo decir que no voy a negar la evidencia, pero que, por ahora, no estoy capacitado para compartir lo que me está sucediendo. Entiendo que la revista lo publique si tiene esa información y me parecería de muy mal gusto y de muy mal compañero desmentir algo que es verdad".
Las razones nunca trascendieron, pero tampoco se dudó jamás del amor, cariño y respeto que aún había quedado instaurado en los corazones de ambos. Debido a esa complicidad eterna y pese a su separación un año antes, en marzo de 2019 Paco lo dejó todo para permanecer al lado de Jorge en su peor momento vital. El comunicador sufrió un ictus y tuvo que ser ingresado de urgencia, entonces, a su vera, cada día estaba su adorado "P".
Superado el bache juntos, la expareja no se ha escondido y se les ha visto disfrutando de salidas a restaurantes italianos de la capital o paseando a los perros del presentador. Tal fue su estrecho vínculo tras la enfermedad de Jorge que se habló de una posible segunda oportunidad entre ambos, pero el propio Vázquez confirmó que no había ya amor romántico entre ellos pero sí una amistad fraternal que durará de por vida.
Una vida de luces y sombras
El pasado verano, Jorge Javier cumplió 50 años. Desde hace décadas es uno de los presentadores más reputados de la pequeña pantalla, pero en su infancia, aquel joven del barrio de San Roque nunca hubiera imaginado el apabullante éxito que alcanzaría años después, aunque tampoco era consciente aún de los duros pasajes que la vida le tenía guardados -como la temprana muerte de su padre y el ictus que padeció en marzo de 2019.
A pesar de los obstáculos que ha encontrado en su vida, Vázquez reconoce que en ese edificio del barrio de San Roque donde se crio fue feliz. Perteneció a una familia feliz y muy corriente. Cada cierto tiempo, Jorge Javier recuerda a sus padres en Instagram y confiesa que a lo largo de su vida se ha hecho más familiar y más sensiblero.
Jorge ha asegurado en más de una ocasión que, al ponerse a hacer este ejercicio, se dio cuenta "de que mi infancia no fue idílica" y "que volver a ella no me hace especialmente feliz". Inmerso en estos recuerdos, hace tiempo también relató públicamente cómo fue su dura salida del armario: "Era el marica del bloque, desde muy niño sabía que me gustaban los niños, imagínate hace 40 años atrás, yo no podía hablar de cómo me sentía, no podía compartirlo con nadie, antes era inaceptable. Eso ha marcado en mi vida, y más cuando tu sexualidad tienes que vivirla a escondidas. Mi padre era de los que prefería un hijo muerto antes que maricón, pero también te haces a eso".
En lo profesional, el punto de inflexión en su carrera fue Aquí hay tomate y su consolidación definitiva ha sido Sálvame. Además, estos últimos años ha podido cumplir uno de sus mayores sueños: convertirse en actor de teatro -y con un éxito abrumador-.
[Más información: Jorge Javier Vázquez y su ex Paco, juntos: cita secreta con 'spaghetti alla bosconara' para dos]