Se acaba de cumplir un mes del adiós de Ana Soria (23 años) a las redes sociales. Mientras millones de jóvenes en todo el mundo no se despegan de las plataformas virtuales, la almeriense tomó una rotunda decisión por amor a Enrique Ponce (49). Las continuas críticas que recibían como pareja y la proliferación de los denominados haters en su perfil de Instagram hicieron que la estudiante de Derecho optara por deshacerse de estos problemas desapareciendo de las redes.
Su determinación a la hora de realizar este drástico movimiento dejó en shock a sus más fieles seguidores, que no tuvieron tiempo para reaccionar. Entre este grupo se encuentran sus, al menos, tres clubs de fans. Se trata de varias cuentas en Instagram creadas hace un año -cuando se conoció la existencia de la joven y su relación con el torero después de la ruptura de éste con Paloma Cuevas (48)- en las que se reúnen más de un millar de personas en cada una por su admiración por Ana Soria.
La mayoría de estos clubs apoyaron la decisión de su musa, pues piensan en lo mejor para ella, pero semanas después de su adiós, estas cuentas han quedado desangeladas. Apenas comparten ya contenido desde junio, pues su motivo y pilar principal de existencia -la joven Ana- ya no se muestra en las redes sociales.
Pero no solo sus seguidores más acérrimos viven las consecuencias de su adiós virtual. La propia Soria es una de las afectadas más directas. No solo porque era una vía de comunicación con su grupo de amigos, sino porque su presencia en las redes iba en aumento y cada vez acumulaba un mayor número de followers. Es cierto que la joven nunca dio muestras de querer sacar provecho económico de su perfil de Instagram, pero sí era el modo en el que su imagen podía mostrarse más cercana, ya que públicamente siempre ha preferido callar ante la prensa y los paparazzi.
Además, su cuenta virtual era el canal por el que aplaudía los logros de su pareja, y donde también daba pruebas de su gusto por la moda y su sencilla elegancia. Con ese perfil podría haber logrado colaboraciones con marcas puntualmente que le hubieran proporcionado algún dinero extra sin tener que caer en la parte más sensacionalista de la exhibición mediática. Sin duda, Ana ha perdido mucho más que Enrique al decir adiós a las redes.
¿Por qué abandonó las redes?
Según apuntaron varios medios, la joven almeriense estaba harta de dar explicaciones sobre cada uno de sus pasos y por este motivo tomó la decisión drástica de eliminar su cuenta de Instagram, siguiendo así los pasos de su pareja.
La estudiante de Derecho clausuró sus redes una semana después que su pareja. Enrique Ponce decidió desaparecer de las redes sociales a finales de mayo tras las continuas informaciones sobre el estado de su divorcio, sobre la gran pelea que protagonizó a gritos con su novia o sobre la próxima comunión de su hija pequeña, evento que supondrá el reencuentro entre el exmatrimonio y en el que no estará presente su actual pareja.
Parecía entonces que la decisión tan rotunda de Ponce afectaba directamente a su novia, pues era el medio por el que demostraba su amor por la almeriense y en el que le dedicaba bellos mensajes y compartía fotografías juntos. Sin embargo, según se ha publicado, la decisión vendría ligada a dos aspectos. Por un lado, por su faceta profesional, ya que al mostrar contenido personal, muchos de su gremio le advirtieron de que debería tomar el rumbo hacia un perfil más profesional. Y por otro lado, porque cuando los usuarios le criticaban -tanto a él como a Ana-, a veces decidía contestarles y se habría dado cuenta de que ya no desea dar explicaciones a personas que ni siquiera conoce.
Este último punto es también el motivo por el que, según apuntan, su novia habría optado por eliminar su perfil de Instagram (anasoria.7). Aunque resulta curioso que este movimiento de ambos haya llegado coincidiendo con los primeros rumores de crisis entre ellos y tras su primera gran pelea captada por los fotógrafos de la revista Diez Minutos.
[Más información: El gran enfado de Ana Soria por las informaciones falsas vertidas sobre su relación con Enrique Ponce]