Cuando Liberto López de la Franca y Gallego, historiador, humanista, biógrafo y exconcursante del reality show Acorralados, salió del concurso en diciembre de 2011 se pensó mucho tomar una importante decisión: denunciar a varios medios de comunicación y, en concreto, a Kiko Hernández (45 años), por "presunta intromisión ilegítima en su derecho al honor, intimidad personal y propia imagen". Tardó en hacerlo, pero lo hizo. Entendía entonces López de la Franca que su honor se había visto mancillado y necesitaba que la Justicia actuara en su nombre.
En aquel momento, López de la Franca solicitaba "150.000 euros por daño emergente y otros 150.000 por lucro cesante". No obstante, esta demanda fue archivada en lo penal, aunque ya Liberto matizó hace unos meses en conversación con EL ESPAÑOL que no se iba a rendir y que aquello no significaba una derrota para él. Estaba prescrita, pero se podía recurrir. No todo estaba perdido. Ahora, este periódico conoce en exclusiva que López de la Franca presentó el pasado 2 de noviembre de 2021 un "recurso de apelación" en el Tribunal Supremo.
Entiende Liberto, y quien lo representa, que existiría un "error patente" en la valoración de la "vulneración del Derecho de la Tutela Judicial Efectiva". Dicho de otro modo, aquella demanda prescribió "tan solo por dos días", arguye Liberto. Se considera que el juez de Primera Instancia y la Audiencia Provincial "han computado mal el tiempo de prescripción del delito". Para ello, en este citado recurso se aportan pruebas que demostrarían que no está prescrito el delito. Este recurso extraordinario obedece a una supuesta "infracción procesal" prevista en el artículo 6469.1, ordinal 4, de vulneración de Derechos Fundamentales reconocidos en el artículo 24 de la Constitución Española, tal y como informa Liberto a este medio. Así las cosas, en lo que concierne a esta demanda por intromisión ilegítima en el honor, la intimidad y la propia imagen la última palabra vuelve a tenerla la Justicia.
Se desconoce, de momento, el recorrido que este recurso tendrá, pero López de la Franca no pierde la esperanza. Otra cuestión que demuestra que la guerra sigue más abierta que nunca entre Kiko Hernández y el que fuera jefe de la casa del infante de España Leandro Alfonso de Borbón Ruiz Austria es la denuncia que interpuso este último contra el colaborador de Sálvame por "acoso telefónico y por utilizar mi imagen sin permiso". Según se hace constar, la demanda de acoso está "en sub judice".
Además de esta demanda, López de la Franca interpuso "una orden de alejamiento", tal y como explicó en exclusiva el propio Liberto a este periódico hace unas semanas. "Le he puesto una demanda por una cautelarísima y una orden de alejamiento por acoso", informó.
Amparándose en el Código Civil y Penal, el actual Gran Maestre de la Real Imperial y Soberana e Ínclita Orden Militar de Caballería de Alfonso XIII daba este nuevo paso: "Cuando salió la primera sentencia, con la que el juez no entra en el fondo y estima que estaba prescrita, ese día de la sentencia me manda a uno de mis teléfonos un WhatsApp en el que me dice una serie de cosas".
Y añadía: "Al tiempo me vuelve a enviar otro mensaje donde me dice que voy perdiendo juicios y que ahora me toca pagar costas. Cosa que no es verdad porque tengo un abogado de oficio y no me toca pagar nada. Hasta en eso está mintiendo este señor. Al hacer esto este señor (enviarle mensajes), yo creo que es una cuestión de acoso. Este hombre ha roto unos límites procesales y extraprocesales al ponerse en contacto conmigo". La última palabra de este nuevo contencioso la tiene, también, el juez una vez interpuesta la demanda. López de la Franca confía: "Está acosándome de una manera directa hacia mi persona. Interpuse la demanda el pasado lunes 11 de octubre. El caso está en el Juzgado de Guardia y ahora tendrá que decidirlo el juez. La orden la he puesto porque aunque yo no vivo en Madrid, mi puesto de trabajo sí está en Madrid. Yo no quiero volver a ver a este señor".
Sostiene Liberto que esos mensajes que él entiende como "acoso" se han producido recientemente. En concreto, en "septiembre" del año presente. Echando la vista atrás, reflexiona López de la Franca sobre su controversia con Hernández: "Esto se inicia incluso antes del reality Acorralados. Este señor, como es un catedrático de embrollos y mentiras, nunca actúa estando la persona presente. En mi caso, en la ausencia de una persona que está en un reality y no se puede defender. Habiendo una indefensión total".
La vida de Liberto lejos de la tele
Más allá de este contencioso, Liberto vive hoy alejado de toda polémica. Conocedor minucioso del Protocolo Real, su labor al frente de la jefatura de la Casa Borbón Austria fue reconocida en todos los ámbitos de la nobleza y la realeza. En la actualidad, vive totalmente apartado de la televisión y la vida mediática -que no de la vida institucional y estamental- por decisión propia desde diciembre de 2011, y ejerce de Gran Maestre y Gran Mariscal General en el Sacro Colegio de Caballería de Alfonso XIII.
Es, además, presidente del consejo general de la Reales Academias e Institutos de España. Hubo un tiempo en que el nombre de Liberto López de la Franca y Gallego gozó de mucha popularidad en la televisión. Desde profesor del programa Las joyas de la corona hasta concursante de Acorralados, en la edición que ganó Nagore Robles (38). Natural de Ciudad Real, hijo de unos padres humildes manchegos, López de la Franca supo labrarse un camino, y hoy su currículo es vasto y amplio.
[Más información: Kiko Hernández, demandado por presunto "acoso telefónico" y una orden de alejamiento]