La fecha marcada en rojo en el calendario de Karlos Arguiñano y su familia: su regreso más esperado

Karlos Arguiñano (73 años) vive un gran momento en el inicio del 2022 pues su último libro La cocina de tu vida: 950 recetas fáciles, rápidas y saludable está en los primeros puestos del ránking de publicaciones bestseller dentro del sector gastronómico. Sin duda, el cocinero recordará con cariño el 10 de noviembre de 2021, pues fue el día en el que lanzó al mercado su 44º libro que tanto éxito está cosechando, pero este jueves también se cumple una fecha muy especial para la familia Arguiñano.

Fue el pasado 1 de diciembre cuando el famoso cocinero compartió un mensaje muy importante para sus clientes a través de su perfil oficial de Instagram: "La Navidad se acerca, y con ella nuestro cierre por vacaciones. El próximo 19 de diciembre, cerraremos hasta febrero. Un merecido descanso para el equipo, tras un año duro, en el que la respuesta de nuestros clientes ha sido excelente", escribió el propio Karlos Arguiñano.

Ahora, con ese plazo ya cumplido, el buque insignia de los negocios de la familia reabre sus puertas este jueves. El hotel y el restaurante situados en pleno paseo marítimo de Zarautz conforman el símbolo de fortaleza de los Arguiñano, el motivo principal por el que seis de los siete hijos del chef trabajan ligados a la empresa familiar. 

Karlos Arguiñano ha anunciado la reapertura de su hotel tras más de mes y medio cerrado.

El imperio culinario tiene su base en el Hotel Ka, un establecimiento que crearon desde cero el cocinero y su esposa hace ya 42 años y medio. Y allí mismo se levantó después el restaurante con sus mismos dueños. El ritmo de los fogones y del alojamiento es frenético. Según los datos públicos, de media el restaurante recibe 24 reservas fijas al día en los 365 días del año -a las que hay que sumar los comensales que llegan in situ sin cita- y una media de 12 reservas al día en el hotel.

El propio Karlos Arguiñano ha anunciado la reapertura de sus locales en un año que cataloga de esperanzador e ilusionante debido a que parece asomarse poco a poco el fin de la pandemia y la vuelta a la normalidad. Y es que desde la cuenta de Instagram del cocinero llevan días anunciando la cuenta atrás, pues para la familia es una cita más que relevante marcada en su calendario, y, más aún, desde que cerraron la temporada de 2021 con "excelentes cifras" de visitantes y clientes pese a las consecuencias de la Covid-19. 

De este modo, la familia numerosa guipuzcoana afronta este nuevo año su reto más sonado al proponerse mejorar los datos de afluencia de a personas que visitan sus empresas. Para ello, están haciendo mayor hincapié en la actividad de las redes sociales, en el feedback con sus seguidores y en mostrar de forma dinámica rincones desconocidos y atractivos de su hotel-restaurante. 

El talento en los fogones y la creatividad ligada al sector gastronómico es el mayor legado que Karlos y Luisi han dejado a sus hijos. Ahora son los herederos del matrimonio, -sus siete hijos Eneko, María, Zigor, Txarli, Martín, Joseba y Amaia-, los que mantienen vivo el ilustre apellido. Pero de los siete hijos, son seis los que están implicados en el mundo culinario, pues Txarli está centrado en su vida en el negocio del cine.

La labor de Joseba es la más conocida ya que está inmerso en el medio televisivo junto a su padre en el programa Cocina abierta, y tiene su propio negocio repostero por la provincia guipuzcoana. Sus hermanos mayores, sin embargo, están más ligados al principal sustento familiar, el hotel-restaurante de Zarautz. Eneko es el jefe de sala del citado local y Zigor es el jefe de cocina, con quien trabaja la benjamina del clan, María, a quien Luisi y Karlos adoptaron en la década de los noventa. Martín, por su parte, se encarga del área administrativa del alojamiento.

Los siete hijos de Karlos Arguiñano junto en la cocina. Redes sociales

Los dos vástagos más alejados del mundo culinario son Amaia y Karlos -al que llaman Txarli para diferenciarlo de su progenitor-. Ella, pese a que es ingeniera, trabaja actualmente en la Bodega K5, propiedad de los Arguiñano en Aia; y él se dedica al mundo audiovisual y posee en su currículum varias labores reseñables en la industria del séptimo arte.

Este mes de febrero, la gran familia, desde cada uno de los puestos de trabajo que ocupa cada miembro en el imperio, se embarca en una nueva aventura, acogiendo a los clientes ofreciéndoles su versión más renovada y mejorada. Ahora les toca superarse a diario para continuar engrandeciendo su ya más que consolidado sustento económico.

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