En las últimas horas, Maite Galdeano (53 años) ha vuelto a ser noticia. Una escena poco común, la de cocinar desnuda junto a Kiko Jiménez (30) fue capturada en una imagen publicada en redes sociales que rápidamente se ha convertido en objeto de numerosos comentarios.

Sin embargo, en los últimos tiempos la propia Maite Galdeano ha sido protagonista de otras noticias mucho menos divertidas. Si el día a día de convivencia con una enfermedad se vuelve complicado, hacerlo con varias de carácter crónico puede acabar consumiendo la paciencia de cualquiera. Quizás esa fuera la razón que llevó a la madre de Sofía Suescun (26) a dejar semanas atrás un titular tan duro como impactante: "Mi enfermedad me permite pedir la eutanasia".

En aquella ocasión, Galdeano se refería a un cáncer en la sangre que le fue diagnosticado, un asunto que venía a añadir más preocupación respecto a un ámbito, el de la salud, en el que no la suerte parece haberle dado la espalda. Hoy tratamos una de las dolencias que padece, la gastritis crónica.

Se trata de una de las enfermedades del aparato digestivo con más incidencia en todo el mundo. La gastritis es, ni más ni menos, que la inflamación del revestimiento del estómago, una afección que, afortunadamente, no es grave para un alto porcentaje de los pacientes y que mejora cuando se prescribe un tratamiento adecuado.

Preocupación moderada

A pesar de ello, no hay que perder de vista un asunto importante: la gastritis puede producir úlceras y, lo que es más alarmante, supone un factor de riesgo para padecer cáncer de estómago. Respecto a esto último es importante conocer si hay antecedentes en el historial médico familiar para establecer medidas que eviten dicho diagnóstico.

Sobre los síntomas más comunes hay que hablar de pesadez, vómitos, náuseas, ardor en un punto localizado en la parte superior del abdomen, o la sensación de saciedad prematura. Todos ellos tienen un punto común, el alto índice de molestia que producen en el paciente, y, por supuesto, la incidencia en posibles cambios de peso.

En el caso de Maite Galdeano se habla de gastritis crónica, una tipología que se caracteriza por aparecer lentamente y desarrollarse durante un largo periodo de tiempo, diferenciándose de la gastritis aguda, que aparece de forma mucho más abrupta.

Los factores que desembocan en la gastritis son diversos. Los especialistas hablan de cuatro. Uno bastante habitual en cualquier tipo de enfermedades es el factor genético: hay determinados aspectos que pueden predisponer al paciente a padecer ese problema de salud y asimismo a desarrollar otras enfermedades autoinmunes asociadas, como la tiroiditis. Los otros tres factores se agrupan en infecciosos (a través de gérmenes), irritantes químicos (como la presencia de bilis, muy habitual en la gastritis crónica) y factores inmunológicos.

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Para establecer un tratamiento primero hay que realizar diversas pruebas para descartar otras dolencias, como úlcera duodenal o hernia de hiato. Se suele recurrir a la gastrocospia, aunque también es habitual una prueba específica para determinar si el paciente ha sido infectado por una bacteria (helicobacter pylori).

Con ese diagnóstico en la mano, los tratamientos pueden ir encaminados a diferentes objetivos, desde la eliminación de la bacteria anteriormente mencionada, hasta medicamentos que regulan la producción de ácido en el estómago.