Juan Magán (44 años), productor discográfico, remezclador, Dj, compositor, letrista y bautizado como 'rey del Electro Latino', está de celebración. Y por partida doble: este pasado viernes, 30 de septiembre de 2022, ha cumplido años y, de paso, ha estrenado un nuevo tema, que promete convertirse en un éxito asegurado, No nos vamos.
Sostiene Magán que está viviendo uno de sus mejores momentos personales y profesionales, cuando no el mejor. La profesión le ha tratado bien en cuanto a reconocimiento y se siente muy orgulloso de la familia que ha formado y de los valores que les ha inculcado a sus hijos. EL ESPAÑOL se ha citado con el artista con motivo del lanzamiento de su nuevo tema, No nos vamos.
En el hall del céntrico hotel Bastardo de Madrid, Juan Magán recibe a este periódico con los brazos abiertos y asegura que todavía le quedan muchos sueños por cumplir en esta profesión: "Por ejemplo, siempre he dicho que soy el fan número uno de Juan Luis Guerra (65). Lo amo, pero como no me siento preparado para tener una conversación con él, porque es un maestro, a mí me da cosa conocerlo". La humildad es una de sus grandes cualidades.
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Ha celebrado su cumpleaños y, además, saca nuevo tema... ¡Doble alegría!
Este viernes ha sido mi cumpleaños. Este tema surge porque estuvimos experimentando una canción que veníamos haciendo durante todo el verano y la hacíamos en los shows cuando cerrábamos. Nos llevábamos la sorpresa que en todos los lugares había un clamor con ella y decíamos 'pero no puede ser, si no la conocen de nada'. Lo seguí haciendo y no era casualidad: en cada cierre era una locura. En las redes nos preguntaban qué era eso. Decidimos terminarla y darle la producción final. Era un cierre de gira de verano maravilloso.
¿Qué cuenta la canción?
La canción no cuenta nada especial. Es algo muy trivial. Es como regresar a los inicios míos y darle un toque más de electrónica y house a mi música. Mi música cada vez se iba más a lo latino y decidí este cambio con mi regreso a Madrid. Regresar a mis inicios y darle más ingredientes de club y discoteca. La canción dice que no nos vamos hasta que cierre la discoteca.
Es usted el rey del Electro Latino. Luego lo han seguido el resto, pero abrió camino. ¿Se siente así?
Sí me siento así en el aspecto de haber introducido un género musical gracias a fusionarlo con otros, porque era muy poco digerible en España la música latina. El fusionarla con la electrónica ha sido fácil en ambas partes del océano. Sí me siento el primero en hacer eso. Lo del rey, bueno, las coronas pesan. Pero sí, lo hice. Fue un trabajo con mucho amor. No fui consciente de lo que se iba a crear y de la globalización de la música latina.
En su momento, incluso recibió ciertas críticas...
Todas. Fue muy difícil. Y duro. A nivel emocional fue duro. Yo polarizaba mucho: gustaba a mucha gente, pero también me odiaban. Me odiaban a muerte, literal. Me mataron varias veces en Wikipedia. Era una locura. Pero cuando uno hace algo con pasión y tiene las ideas muy claras te da un poco igual lo que diga la gente.
¿En qué momento vital se encuentra ahora?
En mi mejor momento. En el mejor momento familiar, estoy feliz. Tengo una familia maravillosa, con cuatro hijos. Nos acabamos de mudar a Madrid desde República Dominicana. Llevábamos muchos años viviendo allí, pero estoy viviendo una nueva forma de regresar a mi país y me lo estoy gozando mucho a nivel profesional. Tengo la suerte de que todo corre perfecto y con ganas de nuevas cosas. Acabo, de hecho, de tomar las riendas de mi carrera, de estar de manera independiente, porque hasta ahora estaba con una multinacional.
Uno de sus hijos está siguiendo sus pasos. ¿Cómo lo lleva?
Bueno, es Marc, el mayor. Él es un loco de la música, es que la vivió desde la barriga. Desde la barriga estaba en el estudio. Mi hijo suda música. Le encanta, pero le he dicho que debe terminar sus ciclos básicos, como sus estudios. Lo apoyo a muerte, pero que no me falle en lo otro porque es fundamental tener estudios y una cultura general. La educación de las personas es el cimiento de todo.
Usted ha triunfado también en el terreno familiar, que no siempre ocurre. ¿Cuál es el éxito del matrimonio?
No lo sé, tengo mucha suerte. Mi mujer es espectacular, el mejor ser humano que he conocido en mi vida. Tiene unos valores increíbles, ella me aguanta en la tierra. Me trae de regreso siempre que vengo de hacer shows, me trae al calor del hogar y la familia. La forma que tiene de educar a mis hijos... La forma de entenderme, de apoyarme, es básica en mi carrera. Ha pasado a todos los planos. Es indispensable.
¿Cuál ha sido su relación con la fama? ¿Hace un buen balance?
Muy poca, en realidad. Es que soy una persona muy introvertida. De hecho, no me veo. Me da vergüenza ir a los sitios. ¿Sabes qué pasa? Como el mundo del artisteo siempre lo enmascara una película extraña... Los artistas parece que vivimos en una película y a mí no me gusta eso. No me gusta verme envuelto en ciertos ambientes, que los respeto y soy amigo de artistas, pero a algunos eventos yo no asisto. No me siento cómodo. No me he visto nunca muy integrado. Hago esfuerzos grandes por ir a veces. Luego me lo paso bien. Prefiero estar en mi casa, jugando al futbol con sus hijos.
Ahí entrará también la educación que le dieron sus padres, en Badalona, ¿verdad?
Los valores de mi familia son lo más grande que tengo. Nunca cursé estudios. Yo me paré en COU y ya no quise estudiar más. Los valores de mis padres son mi mayor riqueza, y también la de mis hijos. Yo les digo a mis hijos que aunque no hayan vivido el barrio, lo llevan dentro de sí. Porque los valores que su madre y yo les estamos inculcando son los que me dieron a mí mis padres. Ellos son el barrio, aunque hayan vivido en sitios maravillosos y tranquilos.
Usted ha llegado a decir que nunca se compraría un reloj de un millón de euros. ¿Cómo es su relación con el dinero?
Nunca, jamás. Ni un reloj, ni un coche, ni nada material. No soy nada materialista. Soy malísimo para eso. Me doy mis caprichos de vez en cuando, porque también me los merezco, pero no guardo nada. Ni un sólo disco mío tengo, tampoco premios. Los regalo. La última medalla se la di a mi hijo, le dije que la guardara hasta que se ganara él la suya. Sé que él la va a guardar. Valoro los premios, pero entiendo que van a estar mejor guardados si los doy. No tengo porque soy malo, lo tiro o deshecho para otra persona.
Todo el mundo quiere colaborar con usted. ¿Alguien se le ha resistido a Juan Magán?
Los que no he conseguido, es porque no estaba preparado. Por ejemplo, siempre he dicho que soy el fan número uno de Juan Luis Guerra. Lo amo, pero como no me siento preparado para tener una conversación con él, porque es un maestro, a mí me da cosa conocerlo. Siempre he dicho que no puedo. Tengo la suerte que con todos los que he querido hacer algo, se ha dado. Con Daddy Yankee (45), por ejemplo, he trabajado en varias ocasiones y las canciones no han visto la luz. Me enriqueció trabajar con él.
Trabaja mano a mano con su hermano, Víctor. ¿Se puede mezclar familia y negocios?
Se puede, se puede. Es difícil, lo entiendo, pero es que la relación que tengo con mi hermano es otra. Es mi amigo, mi mejor amigo y el que no me aplaude todo. Mi hermano es una de las pocas personas que si algo no le gusta, me lo dice. Mi familia, en general, es todo para mí.
A usted lo llamaban Juanito en el barrio. ¿Conserva amistades de entonces?
Todo el mundo me llama así. Sí, las conservo. Son mis amigos. Tengo nuevos, obviamente, pero son contados. Hay muchos conocidos, pero amigos sólo poco más de un par.
Con No nos vamos, ¿se hará gira?
Mi gira no es una gira al uso, yo me paso girando todo el tiempo porque soy Dj. Tengo alma de Dj y lo mío es tocar. Mi gira es todo el año. Yo no paro. El primer show de este año fue en enero y no he parado aún. Voy a parar en noviembre, para hacer canciones y poder pasar la Navidad con mi familia.
¿Se plantea una retirada?
Debo decirte que me la planteaba. Yo me la he planteado porque hubo un momento en mi vida que me sentía pletórito y pensaba 'es el mejor momento, irte habiendo dejado un legado'. Mis canciones perduran y me planteo dejarlo. Además, he sabido diversificar mi negocio y hacer otras cosas. Pero llegó la pandemia, estuve mucho tiempo en casa, he hecho 100 shows y tengo muchas ganas de seguir.