"La popular periodista Ana Rosa Quintana dio a luz a dos mellizos varones el pasado sábado en Sevilla. El parto fue practicado por cesárea y aunque la llegada de los pequeños se precipitó un mes, tanto la madre, de 48 años, como los dos bebés, se encuentran bien". Así hablaban las crónicas de la época sobre la llegada al mundo de Juan y Jaime Muñoz Quintana, los hijos de Ana Rosa, que este domingo, día 6 de noviembre, cumplen 18 años.
"Se llaman Juan, por el padre, y Jaime porque nos gustaba. El padre no estuvo en el parto porque fue mediante cesárea, le hubiera gustado estar, pero tuvo que conformarse con estar detrás de la puerta", expresó AR en ¡HOLA! en la que fue su primera entrevista tras alumbrar a benjamines. "¿Que a quién se parecen? Mitad y mitad. De la nariz para abajo son del padre y los ojos míos", concluyó.
Según la información que maneja EL ESPAÑOL, tanto la presentadora de Mediaset España como su marido, el empresario Juan Muñoz, pretenden cerrar filas en torno a sus dos vástagos. En este tiempo en el que Juan y Jaime han sido menores, Ana Rosa Quintana ha preferido, en todo momento, no asistir con ellos a eventos públicos precisamente para evitar que la prensa, llegada su mayoría de edad, los fotografiase y los llevase a la esfera pública.
Al igual que su hermano mayor, el abogado Álvaro Rojo Quintana (36), nacido de la relación de Ana Rosa con el periodista Alfonso Rojo (70), Juan y Jaime llevarán una vida discreta, apartados voluntariamente del foco mediático y la tele, el ámbito en el que su madre reina.
El primogénito común entre ambos periodistas saltó a las páginas de la prensa del corazón cuando pasó por el altar en el verano de 2016 con la psicóloga Ana Villarrubia (34), colaboradora habitual de los programas producidos por su suegra bajo el paraguas de Unicorn Content TV. El enlace se celebró en Cuacos de Yuste, el municipio cacereño que recibió en sus hoteles y establecimientos a lo más granado del panorama social.
Amantes del fútbol
Las vidas de Juan y Jaime siempre han transcurrido entre su casa de Madrid, un precioso chalé ubicado al norte de la capital; Sevilla, donde nacieron y de donde es natural su padre y Sotogrande, el exclusivo municipio gaditano en el que veranean desde que nacieron. De ellos hay imágenes allí desde la temporada estival de 2005, es decir, desde el primer verano de sus vidas.
En un carrito doble, su padre, feliz y orgulloso, los empujaba, durante un tranquilo paseo familiar, y su madre agarraba del brazo a su razón de amor. En junio de 2013, los mellizos hicieron la primera comunión y a las puertas de la iglesia, Ana Rosa declaraba ante los medios que Juan y Jaime se habían preparado "muy bien en sus clases de Catequesis".
Los regalos de sus progenitores, al menos los que trascendieron, fueron unas plumas estilográficas para recordar tan señalada fecha. Los hermanos no lucieron traje de almirante o marinero, sino que llevaron chaqueta azul, camisa blanca y mocasines, a juego con su padre. Si bien existe muy poca información en relación con los mellizos de Ana Rosa Quintana, EL ESPAÑOL ha podido confirmar que durante varias temporadas ambos militaron en las filas de La Moraleja Club de Fútbol.
Jaime Muñoz jugó como delantero en La Moraleja C.F. 'B', en la categoría segunda juvenil y lo hizo hasta el final de la anterior temporada, es decir, hasta mayo de 2022. Juan Muñoz, por su parte, colgó las botas unos años antes y prefirió ver el fútbol puramente como un hobbie, dejando el balón para los amigos en el equipo de su colegio. Esta temporada 2022-2023, según ha podido confirmar este medio, ninguno de los dos juega ya como profesional.
La última imagen pública de Juan y Jaime data de mayo de 2018, cuando hicieron un viaje familiar a Sevilla. El pasado 10 de octubre, el grupo de comunicación Mediaset España recibía la mejor de las noticias: Ana Rosa Quintana regresaba a su programa tras once meses tratándose de un cáncer de mama.
Entre las personas que acompañaron a la reina de las mañanas a su primera emisión tras casi un año de ausencia se encontraban Juan Muñoz, su marido, y Jaime Muñoz Quintana, uno de los mellizos, que logró esquivar las cámaras y no aparecer en plano.