Cuando a raíz de la pandemia Xuso Jones (33 años) empezó a hablar de la limpieza en sus redes, el cantante y creador de contenido se dio cuenta de varias cosas. La primera, que hay gente muy marrana. La segunda, que muchos de sus seguidores no sabían si utilizar un producto u otro a la hora de limpiar. Para ayudarles en la tarea, acaba de publicar El método Jaspao (Alienta Editorial), un divertido recopilatorio de trucos y consejos para dejar impoluto cada rincón del hogar. "Muchas personas no dan la importancia suficiente a la limpieza y al orden, y eso es una gran equivocación", señala Jones, que también lanzó recientemente su propia marca de productos para el hogar y la limpieza (Jaspao Home) y, gracias al éxito de sus vídeos humorísticos (su perfil en Instagram reúne hoy a más de 920.000 seguidores), forma parte de la lista de la revista Forbes de Mejores Influencers de 2022. JALEOS de EL ESPAÑOL ha podido charlar con el murciano.
En el libro comenta que desde pequeño ha tenido un TOC por la limpieza…
Sí. Desde pequeño, noté que necesitaba verlo todo muy ordenado y limpio. Cuando con diez años o así jugaba con los amigos, recuerdo que ellos estaban llenándolo todo de mierda y que yo me ponía a ordenarlo mientras pensaba: '¿Por qué estoy haciendo yo esto?'. Ahí fue cuando me di cuenta de que tenía un TOC por la limpieza. Durante el confinamiento, estaba tan aburrido en mi casa que empecé a enseñarle a la gente mis trucos de limpieza. Me di cuenta de que había un interés real por la limpieza, porque el primer vídeo que subí, donde salía limpiando el váter, tuvo tres millones de visualizaciones. Ahí pensé: 'Ostras, parece que la gente es igual de friki que yo', y así fue como nació el movimiento Jaspao.
¿Ninguna de sus citas ha salido entonces huyendo al ver cómo tenía la casa?
Qué va. Yo tengo mi casa que, si entras ahora mismo en ella, te parecería que acaba de limpiarse. El mayor truco de limpieza consiste en ir limpiando poquito a poco. No hay que dejar que se agolpe todo en la casa, y que parezca que tienes que hacer el zafarrancho.
¿Tampoco te ha ocurrido nunca lo contrario?
Buff, sí. A mí sí me han dado ganas de salir corriendo de la casa muchas veces. Pensaba: 'Madre mía', pero, por educación y respeto, no decía nada [risas].
¿Es muy tiquismiquis con lo de invitar a gente a su casa?
Hay algo que hago siempre sin que los invitados se den cuenta. Cuando alguien viene a casa y veo que, ya entrando a ella, ha dejado pisadas, mientras estamos ya en el salón cojo y les digo: 'Esperadme un segundico, que voy al baño'. Me voy entonces a coger la fregona para ir a la entrada a limpiar las pisadas. Es que mi cabeza no está tranquila sabiendo que hay allí unas pisadas. Eso es así. Lo mío es un TOC de manual.
Muchos de sus nuevos seguidores pueden desconocer que tiene dos discos y que llegó a ser telonero de Justin Bieber. ¿Le molesta?
Qué va, al contrario. Tengo muy poco ego, y eso hace que viva con la mente muy tranquila y haciendo en cada momento el proyecto que a mí me apetece. Hay gente que se encasilla en algo y, como ya es cantante, parece que no puede hacer otra cosa. Lo que yo quiero es disfrutar de mi vida y disfrutar de los proyectos que me apetece sacar adelante. Me da igual que lleguen personas que no sepan ni una de mis canciones. Si llegan a mí por otra cosa, bienvenidas sean.
Empezó de manera autodidacta, cantando y tocando la guitarra en su habitación. ¿En qué momento terminó McDonald’s apadrinando su carrera?
Han pasado ya once años, y aquello fue una locura. Todo sucedió a raíz del vídeo que grabé cuando fui con unos amigos al McAuto y me puse a cantar. Lo subí a Youtube, y tuvo once millones de visitas, en una época en la que no existía todavía TikTok. De hecho, la palabra ‘viral’ yo la aprendí justo en ese momento. El vídeo se hizo tan popular que McDonalds me contrató para su campaña de aquel verano. Me pagaron muy bien, y con ese dinero pagué la grabación de mi primer disco, que se hizo en Los Ángeles.
Creo que en enero saca nuevo single. ¿Le agobia esa necesidad de innovación diaria en la forma en que se consume música hoy?
Si te soy sincero, es algo que a mí me agobia mucho. No tengo discográfica, así que no puedo llevar el ritmo y el nivel que llevan los artistas que sí están en discográficas, y que sacan una canción cada semana. Ha cambiado mucho el modo de consumo. Antes, tú te comprabas un disco, veías las fotos que traía, y era todo un poco más personal. Ahora, sacas una canción al mercado y, a la semana siguiente, es como si ya hubiera pasado de moda.
También está preparando un programa de vídeos en las redes sociales donde acudirá a las viviendas de sus fans para ayudarles a limpiar y ordenar. ¿Está preparado psicológicamente para afrontar lo que pueda encontrarse?
¡Estoy preparado para eso y para todo! Te puedo decir que ya lo estamos grabando, y que ya me he llevado verdaderos sustos. Lo bonito al final es conocer las circunstancias de cada uno, saber por qué tiene su casa así, e intentar ayudarle a limpiar, para que pueda tenerla en unas condiciones óptimas, porque esto es algo que la cabeza agradece.
Dice que su experiencia en MasterChef Celebrity fue "una puta mierda". ¿Le parece el formato menos blanco de lo que siempre se pensó?
Ha salido ya mucha gente hablando de esto. Cada cual, cuando hace un trabajo, puede tener una experiencia mejor o peor en él. La verdad es que la mía no estuvo muy allá, y ya lo expliqué en el podcast [risas].
Si mañana tuviera que invitar a comer a Jordi Cruz a su casa, ¿qué le prepararía?
¡Ostras! Preferiría que fuese Jordi Cruz el que me preparase algo a mí, porque él tiene un restaurante con estrella [en la Guía] Michelin que dicen que es magnífico, y él es un chef superimportante de nuestro país. Por eso prefiero que él me prepare algún platico a mí.