La revista dedica una ventana en portada a la veterana presentadora para hablar de su estado de salud y anímico. María Teresa Campos, que recientemente tuvo que pasar por el hospital para hacerse unas pruebas, permanece encerrada en su casa y no quiere recibir visitas. Esto ha hecho que sus hijas, Terelu y Carmen, estén seriamente preocupadas. Les gustaría que aceptara reunirse con buenas amigas y jugar a las cartas, como hacía antes para que estuviera acompañada y entretenida. Lo que sí quieren evitar a toda costa es que le afecten las polémicas en las que se está viendo envuelta la familia por la supuesta traición de Gustavo, su chófer. La periodista está en un momento muy vulnerable. Por otro lado, Semana ofrece imágenes exclusivas de Paloma Cuevas y Luis Miguel paseando su amor por Bilbao, hasta donde viajaron en el avión privado del cantante.