Hace unos días, el celebérrimo cantante almeriense David Bisbal (43 años) vivió uno de los momentos más emocionantes de su vida, y de su vasta y premiada carrera como cantante: la Junta de Andalucía le ha otorgado el título de Hijo Predilecto de la ciudad de Almería. Un galardón más que merecido: nadie como él ha llevado a gala su tierra, sus raíces y su acento por el mundo entero.
En este solemne acto, el otrora concursante de Operación Triunfo, muy emocionado, tuvo el gran orgullo de poder cantar su versión del Himno de Andalucía, que ha publicado recientemente. Precisamente, ese día tan importante para él y para todos los andaluces -el Día de Andalucía, este pasado 28 de febrero de 2023-, Bisbal estuvo arropado, desde el público, por dos personas clave en su vida: su mujer, Rosanna Zanetti (34), y su madre, María Ferre Montoya.
Ambas unidas y controlando en todo momento la emoción. En un punto de la velada, David, sobre el escenario, deslizó unas emotivas palabras hacia su padre, José Bisbal, gran ausente en la ceremonia. "Me habría encantado que mi padre hubiera podido venir, pero hace tiempo que, sin dejar de estar físicamente con nosotros, se fue a su mundo. Por desgracia, hoy no es capaz de reconocernos a ningún miembro de la familia", aseguró, con la voz estrangulada por la emoción contenida.
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Tras reponerse y beber agua, Bisbal retomó el hilo y remachó su discurso: "Él fue campeón de España de boxeo, pero antes fue campeón andaluz. Recuerdo cuando jugaba con él; me ponía su flamante cinturón de campeón andaluz, y yo trataba de enfrentarme al gigante de mi padre con su cinturón de campeón de España puesto. Los momentos más duros de la vida a mí me hacen que coja más fuerza y sepa valorar mucho más la vida que tenemos".
A raíz de esta complicada y dura confesión, EL ESPAÑOL ha podido averiguar, desde el respeto, algunos datos de cómo vive el padre de Bisbal en su amada Almería. Según confía una fuente de total solvencia, muy querida por la familia, la enfermedad del padre del cantante se ha llevado -y se lleva- con "total discreción".
Tan sólo los más íntimos conocían de esta realidad familiar hasta que David Bisbal se abrió en canal este pasado 28 de febrero. Explican que, de un tiempo a esta parte, David y su mujer, Rosanna, pasan más tiempo en la ciudad andaluza. No sólo ellos, también los hijos que tienen en común, Matteo y Bianca. El dolor de David Bisbal amaina cuando está junto a su padre, compartiendo momentos cotidianos -como ver la televisión-, y cuando ve a éste abrazar y jugar con sus hijos.
La familia está más unida que nunca: todos a una. Los hermanos Bisbal -David, José María, mánager durante un tiempo de David, y María del Mar- se han dado la mano para ayudar, en la medida de lo posible, a su madre, María. Ella es la que está "a todas horas" al cuidado de su marido.
"No se despega de él. Es una campeona", apostillan. José sólo la reconoce a ella. Apuntan que la dedicación de María es total y admirable y abnegada, acorde a la bonita historia de amor que protagonizaron los padres del autor de Ave María.
José Bisbal, o Pepico -como lo llaman en la intimidad-, lleva una vida muy "tranquila" en su casa de Almería. Y añade el informante: "Su rutina no ha cambiado apenas". Pese a vivir como personas anónimas en Almería, los dos hermanos de David Bisbal tienen una relación muy cercana con el cantante. De su hermano José María, o Josemari -como él lo llama-, el intérprete se deshace en halagos.
En alguna entrevista, el almeriense ha reconocido que José María le ha "ayudado a mantener y desarrollar muchos valores que hoy día comparto con otros amigos y familiares", además de haberle "cuidado como un padre". De hecho, durante un tiempo, el hermano mayor de David Bisbal también fue su road mánager.
Mención aparte se merece la estrecha relación que une a Bisbal con su hermana, María del Mar, a la que le dedicó, hace unos años, un texto con motivo del Día Internacional de la Mujer: "Por aquellas que tras sus gafas o sus prendas, esconden las secuelas de lucha constante. Por la mujer emprendedora que no acobarda los límites y camina firmemente tras su reto. Por las que quisieran poder seguir esas metas y algo se lo impide. Somos grandes, feliz día".
A lo largo de su prolífica vida laboral, José Bisbal compaginó sus labores como funcionario en el Ayuntamiento de Almería con su otra gran pasión: la carpintería. Por su parte, María Ferre ha ejercido durante años como costurera, amén de ama de casa.
La discreción siempre ha sido su máxima desde que David triunfó sin rival en Operación Triunfo, y tocó el cielo después. Sólo en 2018, María Ferre dio un golpe en la mesa, como madre, y llamó en directo al espacio Sálvame.
Quiso defender a su hijo de las acusaciones vertidas en ese tiempo por Elena Tablada (42), expareja del cantante y madre de su primera hija. Fue en el marco de una entrevista cuando la diseñadora definió su relación con Bisbal como "tormentosa", y reveló que en los episodios fundamentales de su historia de amor, como el nacimiento de su hija Ella (13), él nunca había estado.
"Qué barbaridad. ¿Qué necesidad tiene de esto?", estalló María, aclarando al cabo que Elena Tablada "no puede tener queja del trato recibido", y que no entendía "el porqué de tantas barbaridades". "¡Si la que salía con sus amigas y con unos y con otros era ella!". Finalmente, con el paso del tiempo las aguas volvieron a su cauce y, a día de hoy, toda la familia de David está feliz con Rosanna Zanetti.